El Manchester City no tiene techo. El equipo de Pep Guardiola mejora con el paso del tiempo y utiliza las jornadas para pulir su admirado fútbol de posesión. El Arsenal volvió a sufrir en primera persona el estado de gracia de una plantilla que se perfila como una de las favoritas a levantar la Champions League el próximo 26 de mayo en Kiev.

Los londinenses ya vieron cómo el pasado domingo el City les pasaba por encima y levantaba en Wembley la Carabao Cup, el primer título de Guardiola en Inglaterra. Cuatro días después, el calendario de la Premier League volvía a cruzar los caminos de los dos equipos, esta vez en el Emirates Stadium.

El partido se convirtió en una pesadilla para el Arsenal y en el decorado perfecto para que el City se exhibiera sin barreras. En sólo 33 minutos, el resultado ya era de 0-3. Los goles de Bernardo Silva, David Silva y Leroy Sané hacían mayor la herida de un equipo que ha empezado el 2018 con el pie izquierdo. El recital de Guardiola y compañía deja contra las cuerdas a Arsene Wenger, uno de los entrenadores más discutidos en la Premier.

La temperatura, por debajo de los cero grados centígrados, la nieve y la mala conexión entre trenes y metros dejaron las graderías con un aspecto desolador. Muchos aficionados del Arsenal se ahorraron el enésimo ridículo de su equipo, un eterno aspirante al título en el mes de agosto y una decepción en marzo.

La segunda parte se convirtió en un trámite porque los de Londres tienen el punto de mira desviado. Pierre Emerick Aubameyang falló un penalti para agravar la depresión de los suyos, que acaban la jornada sextos a 30 puntos del City, líder indiscutible.

Con la victoria, Pep Guardiola ya tiene permiso para ensayar como celebrará su primera Liga inglesa. El Manchester City tiene 16 puntos de ventaja respecto al Manchester United, segundo, a falta de 10 partidos para que acabe la Premier. Una distancia insalvable que permite dosificar esfuerzos pensando en la Champions. Este miércoles se juega un City-Basilea intranscendente de vuelta de los octavos de final después del 0-4 del partido de ida.