Parecía imposible iniciar un torneo de selecciones en un ambiente más convulso que el vivido antes del Mundial de Rusia, cuando Lopetegui fue despedido por Rubiales justo antes del primer partido de España tras anunciarse el fichaje del seleccionador por el Real Madrid. Pues lo han logrado.

Luis Rubiales agrait mascareta EFE

Luis Rubiales, presidente de la RFEF / EFE

Se teme que pueda haber más positivos

Y es que la situación que vive ahora mismo la expedición española es el de caos absoluto, en el lado opuesto del ambiente idílico que acostumbra a sentirse en las instalaciones de la Ciudad del Fútbol. Busquets y Diego Llorente los 2 positivos detectados hasta la fecha, están un su domicilio, aislados, mientras que el resto de jugadores están confinados en Las Rozas, entrenándose individualmente, pendientes de cualquier indicio de contagio y de las pruebas que se realizan cada día, por si puede haber más bajas. 

Ante el temor de que el número de contagios se dispare, Luis Enrique ya ha llamado a 17 jugadores, que en estos momentos se encuentran en una burbuja paralela. Primero, el asturiano llamó a Kepa, Albiol, Brais Méndez, Fornals, Rodrigo y Carlos Soler. A ellos este miércoles se han añadido 11 de la sub-21: Álvaro Fernández, Óscar Mingueza, Cucurella, Bryan Gil, Miranda, Gonzalo Villar, Pozo, Brahim, Zubimendi, Yeremy y Puado.

No hay que olvidar que, en el caso de que saliera otro positivo, el contagio en la burbuja de la selección española pasaría a ser considero brote, lo que impediría, por ejemplo, que los jugadores viajaran juntos a Sevilla, donde el lunes se enfrentarán a Suecia. De hecho, en las pruebas de ayer, además del positivo de Llorente, salió un resultado inconcluso. 

Busquets España Europa Press

Sergio Busquets, antes de dar positivo en Covid-19 / Europa Press

Críticas a la RFEF y Sanidad ordena la vacunación de los jugadores

Mientras tanto, a la RFEF le siguen lloviendo las críticas. La comunicación del organismo sobre la situación está siendo paupérrima, una falta de transparencia que ha provocado que la bola de nieve cada vez sea más grande, con rumores de todo tipo.

Además, según varias informaciones crece el enfrentamiento entre el Gobierno y la RFEF, que hace unas semanas pidió, sin éxito, vacunar a los jugadores. Rubiales, por ejemplo, criticó tras el España-Lituania que el partido pasara de La 1 a Teledeporte por la participación de los jugadores sub-21.

El gran tema de disputa es la famosa vacunación, que se ha tenido que aplazar por la falta de acuerdo. La medida, excepcional, tenía que aprobarla la Comisión de Salud Pública, compuesta por representantes  de todas las comunidades autónomas, pero este organismo se ha declarado incompetente.

El balón, pues, pasó al tejado del Gobierno, ya que finalmente ha sido Sanidad quien ha la decisión final: los jugadores se van a vacunar. Además de las críticas porque los jugadores de fútbol se vacunen cuando por calendario no les correspondería, se considera que hacerlo ahora ya sería inútil, pues cuando la vacuna empiece a ser efectiva la selección española podría estar ya eliminada del torneo.

 

Imagen principal: Luis Enrique, antes de dar la convocatoria para la Eurocopa del 2020/ EFE