Hará cosa de tres semanas, Netflix estrenó el documental nombrado 'El caso Figo: El fichaje del siglo'. En la pieza audiovisual salen, como no podría ser de otra manera, Luís Figo y Florentino Pérez, pero también hay otros personajes que fueron claves en el transcurso de la historia y que, lejos de ser actores secundarios, acabaron siendo protagonistas.
Uno de los nombres que no trascendió a la prensa después de que se sellara uno de los fichajes más mediáticos de la historia fue el del agente del futbolista portugués, José Veiga. El representante fue, junto con Paulo Futre, uno de los factores claves que empujó al Balón de Oro a dar el paso de la traición, dejando al Barça para firmar por el Real Madrid. Después de cinco años en la capital catalana, Figo hizo las maletas hacia el otro grande de la Liga Santander convencido por Veiga, que tenía claro que era la oportunidad de oro para enriquecerse.

Florentino Pérez: "Vendrán los mejores jugadores del mundo y tú serás el centro del proyecto"
José Veiga tenía interés económico para llevar a su representado al club merengue. Se trataba de uno de los mejores futbolistas del planeta, y en el año 2000, cuando se produjo el fichaje, Luís Figo tenía 28 años, edad en la cual todavía estaba en un gran momento por seguir ofreciendo su alto nivel durante un buen puñado de temporadas.
Obviamente, Florentino Pérez también estaba interesado en que acabara jugando en el Santiago Bernabéu e hizo todo lo posible para convencerlo. Según se revela en el documental, el máximo mandatario de la entidad blanca quería confeccionar un equipo "mágico, como la historia del club" y aseguró a Figo que "vendrán los mejores jugadores del mundo y tú serás el centro del proyecto".

El momento en qué, Helen Svedin, mujer de Luís Figo, podría haber cambiado la historia del fútbol
Netflix muestra como en plenas negociaciones, el futbolista y su mujer, Helen Svedin, quisieron refugiarse de los paparazzi y de los periodistas en la costa de Cerdeña, pero ni allí pasó desapercibido. De hecho, el propio Veiga lo buscaba después de que el jugador tratara de evadir la intensa presión mediática que estaba sometido tanto él como Helen.
No obstante, fue descubierto y convocado a una reunión en Lisboa con Florentino Pérez. Veiga lo quería en el Madrid, Florentino lo quería en el Madrid, pero cuando Figo estaba a punto de rubricar su nuevo contrato, Helen Svedin casi lo evita. Durante la cumbre con Florentino recibió una llamada de la sueca, y cuando acabó de atenderla, cambió totalmente de opinión: "No puedo firmar". Sin embargo, no salen a la luz los acontecimientos siguientes ni como hizo Florentino para convencer al portugués de nuevo, pero la historia ya está escrita y el desenlace se lo sabe todo el mundo. Traición sin miramientos.