La resaca copera afecta al Girona que pierde en el añadido contra el Betis en el Benito Villamarín (3-2). Es el séptimo partido seguido en la Liga sin ganar de los gerundenses que ven cómo las diferencias entre la zona europea y la parte baja de la tabla son cada vez más estrechas. Los catalanes han dado la vuelta al gol inicial de Tello en una aburrida primera mitad, Loren ha empatado el partido y Canales ha transformado un penalti clarísimo de Douglas Luiz en el último minuto.
Sin su hombre gol por acumulación de amarillas, Doumbia entraba en el once titular en sustitución de Christhian Stuani. Capaz de de desconcertar al aficionado rojiblanco y de hacerlo levantar del asiento al mismo tiempo, Doumbia ha estado muy protagonista en los dos goles catalanes.
EFE
Monólogo bético entre siestas
El Girona parecía haber celebrado el pase a cuartos de final de la Copa anoche. Es domingo por la mañana y los catalanes que parecían cualquier joven que hubiera salido hasta las siete de la mañana del sábado. El Girona no estaba y eso lo aprovechaba un Betis que desde el primer minuto quería dejar claro cuál era su idea de juego. Monólogo inicial de juego de posesión del equipo de Setién que veía como los gerundenses, impotentes, corrían detrás del balón sin verlas venir. Tello, con un golazo, convertía una falta peligrosísima en la frontal del área. Bono, que había llegado a tocar pelota, no podía hacer nada para minimizar la potencia del disparo.
Y a partir de aquí el Betis ha dormido el partido. Seguía tocando, pero sin peligro. Pases y más pases, todos ellos horizontales y sin la intención de romper líneas. Los andaluces parecían cómodos con el resultado, pero el partido no estaba ni mucho menos decidido. El 1-0 parecía una realidad al descanso. Hasta que ha aparecido Doumbia.
El delantero de Costa de Marfil, bastante cuestionado por su juego, ha cambiado el partido en menos de diez minutos. Dos regalos en la salida de balóndel Betis, sorprendente teniendo en cuenta su tipología de juego, han acabado con dos goles catalanes. Doumbia, después de interceptar un pase hacia Pau López, la ha cedido para Stuani que le ha hecho un regalo a Aleix Garcia. El catalán ha marcado a portería vacía para empatar un partido que, a pesar del dominio inicial del Betis, estaba siendo soporífero.
El gol ha despertado a los gerundenses que aprovechaban la pobre actitud de los locales. Nueva pérdida en la salida de balón y gol de Doumbia después de rematar de cabez un centro de Portu que había evitado que el esférico saliera por línea de fondo. Giro radical al partido. Puñetazo sobre la mesa del Girona ante un Betis que había acusado el poco ímpetu mostrado.
El suicidio en el último minuto
En la segunda parte el Betis salía con otra cara. Mucho más incisivo y vertical que en la primera. Loren culminaba un contraataque perfecto de los locales para empatar el partido a los diez minutos de juego. Y el partido volvía a empezar. Por suerte para los espectadores, con bastante más ritmo que en la primera parte.
Los dos equipos disponían de ocasiones y cuando no era Doumbia por un lado era Lo Celso por el otro. El partido estaba completamente abierto. Eusebio optaba por un planteamiento más conservador en los últimos minutos: cambiar sus laterales para introducir hombres más puramente defensivos; más la entrada de Douglas por Doumbia.
Precisamente Douglas Luiz ha sido el anti-héroe de los gerundenses. Un penalti absurdo del brasileño chutando el pie de Lo Celso en el último minuto de partido sentenciaba el encuentro. Canales transformaba engañando a Bono y, sin tiempo para más, el árbitro silbaba el final del partido. El Girona se había autodestruido.
Los catalanes, si ganaban, tenían la oportunidad de avanzar al Betis en la clasificación y situarse en posiciones próximas a Europa. La derrota puede provocar que Espanyol, Eibar o Athletic, entre otros, superen al Girona cuando acabe la jornada. Ya van siete partidos consecutivos en la Liga sin ganar y la última victoria en la competición data de noviembre.