El Bayern de Múnich tiene una asignatura pendiente, que es incorporar a un nuevo central a la plantilla. Aunque contrataron a Kim Min-Jae, uno de los mejores del planeta en esa posición, procedente del SSC Napoli, Thomas Tuchel pide a la directiva traer a otro crack para reforzar el eje de la retaguardia, que acompañe a Matthijs de Ligt y a un Dayot Upamecano que no acaba de convencer con su rendimiento en las citas importantes. Intentaron firmar a Trevoh Chalobah, pero no llegaron a un acuerdo.

Thomas Tuchel durante un partido del Bayern Munich de Champions League / Foto: Europa Press
Thomas Tuchel/ Foto: Europa Press

Durante el mercado veraniego dejaron salir a Lucas Hernández, que firmó por el Paris Saint-Germain, a Daley Blind, que se unió al Girona, y a Benjamin Pavard, que desembarcó en el Inter de Milán. Así que ha quedado un vacío demasiado grande, que deberán de llegar con un fichaje. Y uno de los candidatos que más gusta al entrenador alemán es Andreas Christensen, quien sorprendió a todos en su primera campaña en La Liga EA Sports.

No había expectativas muy elevadas cuando llegó al Barça, y la mayoría de la gente esperaba que fuera un simple suplente, debido a la presencia de Gerard Piqué, Jules Koundé o Ronald Araújo. Pero el internacional danés se asentó como una de las piezas clave en los esquemas de Xavi Hernández, mostrando un rendimiento tan bueno como regular. Y fue uno de los responsables de la solidez defensiva que mostraron a lo largo de la campaña, permitiendo a Marc-André ter Stegen batir muchos récords, y ganar el Trofeo Zamora.

Las destacadas exhibiciones que realizó el futbolista de 27 años le han servido para que en el Allianz Arena se anoten su nombre en rojo, y mediten seriamente realizar una ofensiva para sacarlo del Camp Nou en el próximo mes de enero. Saben de la necesidad de Joan Laporta de obtener ingresos, y creen que una oferta superior a los 40 millones de euros puede hacer dudar al presidente azulgrana, que tendría una oportunidad magnífica de hacer negocios con un crack que llegó a coste cero.

Además, Christensen conoce perfectamente la Bundesliga, después de jugar durante dos años en las filas del Borussia Mönchengladbach, y ya trabajó junto a Tuchel, cuando coincidieron en el Chelsea.

Christensen pedirá un aumento de sueldo para seguir en el Barça

Christensen aprovechará el enorme interés que existe en su contratación, ya que Liverpool o Newcastle United también pensaron en su firma, para solicitar un aumento de sueldo al Barça.

Quiere que se le reconozca la importancia que tiene, y si no se cumplen sus peticiones, amenazará con marcharse.