Este sábado, Josep Maria Bartomeu ha visitado a Sandro Rosell en Soto del Real, prisión en que este último lleva un año de forma preventiva por supuesto blanqueo de capital (obtenido de la venta de derechos audiovisuales de partidos de la selección brasileña de fútbol) y organización criminal. El actual presidente del Barça ha ido a ver a su antecesor y, después del encuentro, ha pedido su libertad: "Su situación es muy injusta".

"Me he quedado muy impresionado después de ver a Sandro Rosell privado de libertad y en prisión preventiva, pero al mismo tiempo me marcho tranquilo porque me he encontrado a un hombre fuerte y sereno a pesar de las difíciles circunstancias en que vive", ha valorado a los medios de comunicación. El máximo dirigente blaugrana también ha tildado la situación de "injusta" y no le ve "ningún tipo de base sólida" al asunto teniendo en cuenta "que lleva más de un año en la prisión y no ha sido juzgado": "Es una barbaridad que se tiene que acabar inmediatamente".

"Lo digo después de haberlo consultado con catedráticos y abogados expertos en la materia: no hay evidencia de delito ni de ninguna acción que pueda considerarse punible. Reclamo su libertad. Hace falta justicia y sentido común para solucionar la situación que está viviendo Sandro desde hace más de un año, alejado de su familia y de sus amigos", ha sentenciado Bartomeu después de su primera visita a su predecesor.

El que fue presidente del Barça entre 2010 y 2014 entró en Soto del Real el 25 de mayo del 2017 después de ser detenido por la Guardia Civil. La jueza Carmen Lamela dictó acto de prisión preventiva y, desde entonces, ha denegado hasta once veces la petición de libertad condicional que han solicitado a sus abogados porque, considera, existe "un riesgo elevado de fuga".