El Barça luchará este domingo por ganar su 11ª Liga de Campeones de balonmano después de superar en la semifinal de este sábado, disputada en el Lanxess Arena de Colonia, al Kiel alemán (30-34), gracias en parte a una extraordinaria actuación del extremo zurdo Aleix Gómez, autor de doce goles. Su rival será el Kielce polaco, entrenado por Talant Dujshebaev, el único equipo que ha sido capaz de derrotar al Barça dos veces esta temporada y que aspira al título tras batir al Veszprém húngaro (37-35) y en la que será una final inédita en la competición.

Además de Aleix Gómez, fueron decisivas en la victoria blaugrana la gran segunda parte de Gonzalo Pérez de Vargas en la portería, la sólida defensa que ha dejado a los germanos en solo 12 goles tras el descanso y el derroche físico ante un rival de entidad que lo ha intentado todo, pero no ha podido.

Igualdad en la primera parte

Ha sido un verdadero pulso entre el potencial físico en ataque y defensa del Kiel contra la velocidad y el talento de la primera línea blaugrana. Jugadores como el pivote alemán Patrick Wiencek y el lateral zurdo noruego Harald Reinkind, sus 'cañoneros', se han visto superados en la primera mitad por el talento de Aleix Gómez y del lateral zurdo francés Dika Mem. Esto ha llevado a un equilibrio casi total en el marcador en la primera mitad, donde la iniciativa germana de un gol arriba ha sido neutralizada por la velocidad del Barça.

Ni los cambios de esa ofensiva temible del Kiel en 'siete en ataque' sin portero han podido evitar una mínima ventaja del Barça al descanso (19-18), aunque todavía quedaba un gran esfuerzo por delante para lograr la ansiada clasificación para la gran final.

Aleix Gómez y Pérez de Vargas, decisivos

En la segunda mitad, se ha mantenido la tónica de la primera, aunque el Barça ha mejorado en defensa, mientras que Aleix Gómez, con velocidad, superaba una y otra vez a un impotente Niklas Landin. Solo una doble exclusión de jugadores del Barça ha hecho reaccionar al Kiel, pero Gonzalo Pérez de Vargas ha empezado a ser infranqueable y los intentos de Haniel Lángaro y el omnipresente Aleix han situado el marcador en 31-25.

El Kiel ha tenido que cambiar su sistema de juego, ser más agresivo, para buscar la remontada, pero el ataque alemán se ha estrellado contra Pérez de Vargas, que en la segunda mitad ha logrado 8 paradas. Aún y así, el Kiel ha llegado a ponerse 32-29 a falta de 3 minutos, un acercamiento que ha quedado en nada gracias al buen hacer blaugrana, que ha vuelto a apretar los dientes hasta poner el definitivo 34-30 en el marcador.

 

Imagen principal: Luka Cindric, en una acción del Kiel-Barça de este sábado / EFE