Sigue la cuenta atrás para el cierre del mercado de fichajes. El próximo día 31 de agosto será el último día para poder incorporar o vender futbolistes a la Liga española y el Barça afronta el último tramo de su particular operación biquini con varios frentes abiertos.

Una vez ya se han incorporado Arturo Vidal, Clément Lengelt, Arthur Melo y Malcom, el capítulo llegadas parece prácticamente cerrado a no ser que salga una oportunidad irrefutable. Así lo aseguraba el mismo presidente Josep Maria Bartomeu el pasado sábado.

Pero en el capítulo salidas el club empieza a ver como la larga plantilla necesita adelgazar. Últimos días pera acabar de colocar a algunos futbolistas y mucho miedo por alguna inesperada salida.

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Temor por Rakitic

El gran problema que le ha llegado al Barça en los últimos días es el interés del multimillonario PSG por Ivan Rakitic. El club francés, que ya dio un quebradero de cabeza la temporada pasada pagando los 222 millones de la cláusula de Neymar Jr, ahora no le supondría mucho problema abonar los 125 de la cláusula del futbolista croata.

Parece un juego de niños, pero el PSG, que vio cómo el Barça podría tocarle al francés Adrien Rabiot para llevárselo hacia Barcelona, quiere venganza. Primero se fijó en Sergio Busquets, pero está descartado porque el futbolista de Badia del Vallès se acerca a la renovación. Y ahora parece que el objetivo es combatir con la moneda de Rakitic.

El Barça está entre la espada y la pared, y podría ver como uno de sus nuevos líderes en el medio del campo después de la marcha de Andrés Iniesta, y uno de los grandes activos de la actual plantilla, podría hacer las maletas. Rakitic, con un papel fundamental en las últimas temporadas en el Barça y con un papel indispensable para llevar a Croacia a la final del Mundial de Rusia, cogería más galones en can Barça esta temporada.

Polivalente como pocos, con llegada y con un buen toque de balón, Rakitic marca las diferencias y ya conoce perfectamente que necesita el Barça. Si quiere marcharse y llega a un acuerdo con el PSG, el dinero no sería un problema para el club francés. El Barça espera y Rakitic tendrá que decidir.

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Rafinha se aleja

La otra gran operación que parece bien encaminada es la de Rafinha Alcántara. El centrocampista brasileño, que la temporada pasada ya jugó cedido al Inter de Milán, podría tener las horas contadas en Barcelona. Su padre y representante, Mazinho, negocia con el Betis el cambio de aires de su hijo.

Una cesión para Rafinha y quien sabe si con el espacio que dejaría habría una nueva llegada en el medio del campo. Frenkie de Jong, del Ajax, es una remota opción porque sólo se podría negociar la llegada del futbolista de 21 años en caso de caer en la previa de la Champions. Y después entra en los planes Paul Pogba, con más reconocimiento y vigente campeón del Mundo con Francia. El problema del francés es que el Manchester United de José Mourinho no lo pondría fácil.

Y más allá de estos grandes nombres queda resolver el grosor de la superpoblación. Primero pensar en la cesión de Paco Alcácer o Munir, que tienen la suplencia asegurada, pero dos delanteros es demasiado. Y después entran los casos de Sergi Samper, que una nueva lesión lo ha dejado fuera de la gira en los Estados Unidos, y la de Jasper Cillessen, todavía con la puerta abierta si llega una buena oferta.