No hay posibilidad de distracción. Esta es la principal instrucción para el partido de Copa de Rey, y más después de la experiencia del Real Madrid que empezó sufriendo en la vuelta de su eliminatoria. La placidez es lo que busca esta noche el Barça en el Camp Nou con el fin de no vivir con sobresaltos y certificar el pase a los octavos de final de la competición copera. A los blaugrana les toca confirmar el buen resultado de la ida contra el Real Murcia (0-3) y así empezar de la manera esperada la defensa del título.
También se busca pasar la primera página de la competición con rotaciones y sin desgastar a las grandes estrellas. Tal como pasó en Murcia, los titulares de este Barça de Ernesto Valverde se quedarán descansando. El día del partido solidario en el Camp Nou ya es seguro que no será el día de Leo Messi, Luis Suárez o Andrés Iniesta. En su lugar estará el fondo de armario.
Presentación y reivindicación blaugrana
Como ya es habitual en estos partidos de menos entidad y con todo muy enfocado, es el momento de las reivindicaciones. Los futbolistas que tienen menos minutos volverán a aparecer con un rol diferente, pero con la intención de poder ganarse un sitio. Los papeles del Barça parecen inamovibles, pero las pequeñas grietas de las lesiones y las sanciones pueden abrir las puertas a los suplentes que aporten más garantías.
Vermaelen podrá confirmar su capacidad de adaptación, Paco Alcácer su olfato goleador, Denis Suárez su dominio y visión del juego, y Deulofeu su actitud desequilibrante. Momento de dar un paso adelante y también de volver a ver las caras más jóvenes venidas del filial. El Barça más escondido y con más futuro se presenta en el Camp Nou.
Y todo eso llega para seguir la estela de resultados de un inicio de temporada que convence el barcelonismo. Diecinueve partidos consecutivos sin conocer la derrota y con la firme obligación de mantener el nivel. Pero más allá de las cifras, otro de los retos de Valverde es ganar jugando con ADN.
Murcia confiante
El objetivo de la remontada del Murcia es tarea casi imposible, pero en estos partidos de Copa todo puede pasar y no sería la primera vez que se viera alguna sorpresa. Tres goles son muchos goles, pero la racha del actual Murcia abre la puerta a la confianza.
Los murcianos llevan cinco victorias de seis posibles desde la última visita del Barça en la Nueva Condomina. Un inicio con dudas del conjunto de Segunda división B, ha sido acompañado con un último mes sin discusión. Ahora bien, el buen trabajo no se puede debatir, pero el nivel del Barça es muy superior al Murcia juegue quien juegue.
Los once de El Nacional
