Dentro de unos años cuándo Leo Messi ya se haya retirado nos preguntaremos: ¿Cómo es que el Barça de Messi sólo ganó cuatro Champions? Pero esta pregunta ya nos la podemos hacer ahora.

No puede ser que el mejor jugador de la historia del fútbol sólo haya podido levantar cuatro orejudas. Leo Messi, el futbolista total, lleva decepción tras decepción en las últimas tres temporadas, sólo llegando en los cuartos de final de la máxima competición europea en los mejores años de su carrera.

Un nuevo fracaso del Barça en Europa que vuelve a dejar al futbolista más determinante sin argumentos. Y no es problema suyo porque el equipo ha conseguido lo que ha conseguido esta temporada gracias a él. Y también en los últimos años. El problema es más de fondo. Ya hace tiempo que el proyecto se refleja en los resultados y se salva gracias al argentino. Y ahora tendríamos que analizar qué falla en este Barça.

Español Barça copa Messi efe

Los resultados lo tapan todo

El récord histórico de 38 partidos de Liga sin conocer la derrota denotan un muy buen rendimiento del Barça. Que se haya llegado en la final de Copa también. Pero donde de verdad se ve como funciona un equipo es en la Champions. Entre los mejores. Y una temporada más se ha caído con estrépito.

Ernesto Valverde acaba de iniciar un proyecto sólido, con ideas claras y con los resultados que lo avalan. Pero la eliminación de la Champions desenmascaran el fondo.

El Barça ha tenido de todo esta temporada. Un inicio con dudas y mal juego; momentos sublimes con un juego colectivo que se acercaba a los mejores tiempos; y también con unas últimas semanas de bajada general. Los resultados han tapado un problema más allá de Messi, que ha sustentado al equipo cuando más lo ha necesitado.

Leo Messi banquillo Sporting Champions EFE

¿Problema de planificación?

Desde la temporada 2014/15 cuando el Barça ganó su última Champions en Berlín que el equipo no se renueva. Desde aquella final hasta esta eliminación de Roma que prácticamente el once titular no se ha movido. Ocho futbolistas repiten y sólo Umtiti, Sergi Roberto y Semedo son las novedades. Una plantilla que sigue siendo la misma de los últimos años, con una base sólida, pero siguiendo sin recursos.

Precisamente desde este último título europeo se hace evidente que la planificación tiene un problema. El banquillo ha cambiado por completo pero parece que no hay nadie que pueda mejorar al equipo. Y todo con el detrimento de la marcha de Neymar. En la temporada 2015/16 llegaron Arda Turan y Aleix Vidal. En la temporada 2016/17 llegaron Denis Suárez, Digne, André Gomes, Alcácer y Cillessen. Y este año han llegado Semedo, Dembéle, Paulinho, Coutinho, Yerry Mina y ha vuelto Vermaelen.

Más de diez futbolistas que entran nuevos, para aportar fondo de armario y competencia por la titularidad. Pero nada de nada. El Barça tiene que seguir confiando en Sergi Roberto de lateral derecho cuando podría ser un grandísimo centrocampista y sin saber quién puede ser el hombre del lado derecho del ataque.

¿El fracaso del fondo de armario y la poca renovación es culpa de la directiva, de la mala gestión de la dirección deportiva, de l'entrenador o simplemente es un proceso de inadaptación de los nuevos? El Barça sigue siendo el mismo de siempre desde hace años y con los mismos tics.

Ahora ha llegado Coutinho para revolucionar, pero todavía no está adaptado. Y Dembélé, la otra gran esperanza de futuro, no ha podido demostrar nada por las lesiones. Y si a todo eso nos damos cuenta que la gente de la casa, la formada en la Masia y con ADN Barça sigue siendo el último de la fila, quizás tendremos que hacer un replanteamiento.

Andre Gomes Ernesto Valverde EFE

Messi está solo

El Barça vuelve a mostrar sus vergüenzas. Nadie acompaña al jugador '10', aquel que siempre aparece y te decide los partidos y los títulos. Pero él solo no siempre puede llevar el peso del equipo. Ya lo dijo Pep Guardiola hace unos años que se le tenía que rodear bien. Y por lo que se ve no ha sido así.

Iniesta sigue brillando, pero ya se está despidiendo. Busquets es indiscutible, pero tampoco puede destacar siempre. A Piqué ya lo acompaña un gran defensa como Umtiti, pero que falla en los momentos claves. Ter Stegen detiene, pero no puede pararlo todo. Sergi Roberto, Rakitic, Jordi Alba y Luis Suárez lo hacen todo para el equipo, pero no son Messi.

Y es que Messi sigue siendo el mismo, sigue mejorando, sigue cogiendo el timón del Barça, pero nadie le acompaña. Ganar sólo cuatro Champions es decepcionar a Messi.