Las nuevas generaciones de aficionados del Barça puede que ni lo sepan. Pero hubo una temporada, hace unos 34 años, cuando la Liga premiaba la victoria con 2 puntos en lugar de los 3 de ahora, y en España todavía existía la peseta, que el Barça iba camino de conquistar el título del campeonato, que a falta de seis jornadas para el final sacaba una venta de 5 puntos al segundo (Real Sociedad), y de 6 al tercero (Real Madrid). Aquella Liga, la de 1981-82, la perdió el Barça porque no ganó un solo partido más. Empató 2 y perdió 4.

Ningún aficionado de esa nueva generación que ha visto un Barça triunfador podía haber imaginado que hace un mes el Barça iba a estar sufriendo tal transformación que era capaz de transportarse en el tiempo, pero en lugar de ir hacia el futuro, iba hacia el pasado.

Los mismos puntos que hace un mes

El 13 de marzo pasado, poco antes de que los jugadores marcharan con sus selecciones nacionales, el Barça era un líder sólido con 75 puntos, 8 más que el Atlético que acababa de perder en Gijón, y 12 más que el Real Madrid. Los blaugrana empataron a 2 en campo del Villarreal después de ir ganando 0-2 y acabarían con 76 puntos. 

Un mes y 4 días después tienen los mismos puntos (76), lo que quiere decir que sólo han sumado un punto de los últimos 12 disputados producto de un empate y 3 derrotas. El Atlético de Madrid le ha igualado en lo alto de clasificación (76) y el Madrid (75) está a un solo punto. El Barça no ha ganado más que un partido en los últimos 35 días: contra el Atlético de Madrid, la ida de los cuartos de final de la Champions, competición de la que acabó eliminado.

Zuviría: "Esa era mi Liga"

En la temporada 1981-82, el equipo que entonces dirigía Udo Lattek, comenzó a perder, precisamente contra el Valencia (3-0), después en casa con el Espanyol (1-3), en el último minuto en Pamplona (3-2), empató con el Athletic en el Camp Nou (2-2), perdió con el Real Madrid (3-1) y empató en casa con el Betis (2-2).

"El día que jugamos el derbi en casa contra el Espanyol yo le dije a Udo: 'Míster hoy somos campeones', pero ese día jugamos mal, todo el equipo jugó mal, y Lattek me quitó a mí que marcaba a Lauridsen, y que era el que más envalentonaba al equipo. Esa era mi Liga. Yo no jugué más y el equipo perdió". Así lo recuerda Rafael "Torito" Zuviría, célebre por marcar el 3-0 con el que el Barça igualó al Anderelcht y ganó en los penaltis, en la Recopa del 78-79.

"Cuando los equipos tienen una racha mala no hay explicación, pero ni la pelota quiere entrar y los porteros rivales pasan a ser internacionales. Yo vi el partido contra el Valencia y Neymar falla ese uno contra uno con el portero una de 100 veces; Piqué tampoco falla ese remate, y Leo mete ese cabezazo. Ahora tienen que moverse más para volver al ritmo de antes", opina Zuviría. En aquel equipo jugaba Bernd Schuster, pero también Artola, Tente Sánchez, Alexanko, Olmo, Manolo, Simonsen, Estella, Quini y Morán, entre otros.

Víctor: "Lo nuestro fue físico"

Para Víctor Muñoz, también integrante de aquel equipo, la cuestión pasa metafóricamente hablando por la climatología: "Que se gire el viento", dice Víctor que aquella temporada que se lesionó contra el Madrid.

"Lo nuestro fue un bajón físico, lo de este Barça no es eso", asegura Víctor. "Hicimos una preparación que nos llevó a salirnos en la primera vuelta, extraordinaria, pero en la segunda nos hundimos, fue deficiente y tuvimos lesiones. Esta vez las circunstancias son distintas. El fútbol es diferente. Es cierto que hay detalles que distraen y no ayudan como los problemas fiscales y judiciales que tienen algunos jugadores, o como el parón por partidos de selecciones. Pero para mí el problema actual del Barça es anímico no físico, no tienen lesiones, están unidos, sólo que tienen que demostrar otra vez todo eso que les llevó arriba".