En un Camp Nou vacío y sin espectadores el Barça ha seguido la línea marcada desde el retorno del fútbol la semana pasada. Nueva victoria en la Liga Santander contra el Leganés para mantener el liderato gracias a los goles de Ansu Fati y de Leo Messi de penalti (2-0).
Un silencio extraño
El silencio ha vuelto a ser protagonista en el estadio culé después de dos años y medio desde la primera vez que las gradas quedaron vacías aquel recordado 1 de octubre del 2017. Pero también ha sido un factor clave de un partido que ha enfrentado al líder de la Liga contra el colista.
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Si en la última jornada el fútbol del Barça volvió a animar después del parón forzado por el coronavirus, esta vez no ha desentonado, pero no ha sido lo mismo. La altura de un enorme Camp Nou sin almas ha engullido el espíritu de un Barça que ha chocado una vez y otra contra el Leganés.
El partido parecía sencillo para los blaugrana, pero el Leganés ha decidido encerrarse en torno a su área y prohibir al Barça filtrar ningún balón. La posesión ha sido totalmente monopolizada por los locales, mientras los madrileños iban sobreviviendo e intentando evitar que Leo Messi entrara en juego. Pero no contaban con el factor Ansu Fati.
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Todo el mundo sabía que cuando Messi se decidiera a dar un paso adelante, el colista sufriría. Y dicho y hecho. Después de algunos centros al área con resultado fallido, diagonal clásica del argentino, yendo a buscar la pelota en el círculo central, y los astros se han alineado.
Junior Firpo, que no destaca mucho por su lucha, se ha vestido de Arturo Vidal para llevarse un balón en el vértice izquierdo del área del Leganés. Y después ha sido Ansu Fati quien, con su desenvoltura habitual, se ha atrevido a hacer un disparo seco y a baja altura para marcar el primer gol pocos minutos antes del descanso.
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Messi resuelve
Pero de los pocos espacios de la primera mitad se ha pasado a un cambio de juego a la segunda. El Leganés, obligado a marcar para sacar rédito del duelo en forma de puntos, ha pasado a modo ofensivo. Y como se han generado espacios y ha entrado Luis Suárez para acabar de sentenciar, el Barça sólo ha tenido que madurar el partido y esperar al segundo gol.
Griezmann ha marcado en el 65 pero el VAR ha anulado el gol por un fuera de juego previo de Semedo. Y dos minutos después Messi se ha inventado una jugada individual, marchándose de cuatro rivales, para acabar recibiendo falta dentro del área y disponiendo de un penalti a favor. Messi no ha fallado desde los once metros.
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Los últimos veinte minutos han sido con más control del Barça y poco sufrimiento. El Leganés ha puesto a prueba a la defensa blaugrana, pero esta vez no ha habido grietas. El liderato sigue siendo del Barça una jornada más.