Ahora hará un mes que surgió la propuesta de un grupo de socios para poner el lazo amarillo en la comunicación corporativa del Barça en defensa de los presos políticos y contra el juicio al procés. El club, lejos de querer descartar cualquier idea de sus socios, deja abiertas las puertas a adoptar el lazo amarillo, pero también pide que si la voluntad de los socios es así, se tienen que seguir los pasos establecidos y acabar decidiendo en un referéndum.

"El club es un espacio de libertad y debate y siempre está abierto a que haya un colectivo que plantee propuestas si sigue los canales establecidos", ha dicho Josep Vives, el portavoz blaugrana. Unas palabras que no hacen más que reforzar la condición del club a escuchar a los socios y que sean ellos los que decidan el futuro de la entidad.

La propuesta 'Més que un llaç' ya tiene más de 4.000 firmantes y casi 800 socios. La voluntad es que el club utilice el lazo amarillo en su comunicación corporativa y también esté presente en la gradería del Camp Nou.

Vives también ha reafirmado la posición del club y el discurso respecto de "la injusta prisión preventiva de los presos y de los presos políticos", aparte de recordar el apoyo en el proceso judicial al expresidente Sandro Rosell.