El Barça de Pep Guardiola fue uno de los mejores equipos de la historia. La culminación de la obra del técnico de Santpedor seguramente tuvo lugar en la final de la Champions League de la temporada 2010/11, cuando el Barça destrozó el Manchester United de Alex Ferguson en Wembley.

El proyecto, sin embargo, empezó dos cursos antes. El primer Barça de Guardiola acababa de perder a Ronaldinho y Deco, había fichado incógnitas como Martín Cáceres o Alexander Hleb y apostaba por algunos jugadores del filial desconocidos para el gran público. Era un Barça imperfecto que arrasó y se llevó la Liga, la Copa y la Champions. Diez años después, las cosas han cambiado mucho.

Messi, Piqué y Busquets, los únicos supervivientes

Sólo tres jugadores de aquella plantilla siguen en el primer equipo del Barça. Son Leo Messi, Gerard Piqué y Sergi Busquets, los tres capitanes del equipo. De Messi pocas cosas se pueden decir. El argentino ya era el líder de aquel grupo -acabaría ganando su primera Pelota de Oro a final de curso-, pero, diez años y 493 goles después, el 10 se ha convertido en el mejor futbolista de la historia.

Busquets fue un invento de Pep Guardiola. El técnico catalán apostó por un chico de 20 años que no destacaba en el filial y lo convirtió en un medio centro defensivo de categoría. El de Badia jugó 41 partidos, sentó a Touré Yaya y diez años después, aunque los rankings de France Football no se lo reconozcan, es uno de los mejores mediocampistas del mundo.

Gerard Piqué fue uno de los fichajes sorprendentes de la temporada 2008/09. El central catalán volvió del Manchester United a cambio de 5 millones de euros y muy pronto se convirtió en un indiscutible en el eje de la defensa. Más allá de las cifras (cada temporada ha disputado, como mínimo, 38 partidos), el carisma del defensa incluso ha trascendido fuera de los terrenos de juego.

Los últimos pasos de Xavi, Iniesta y Eto'o

Fueron miembros indiscutibles de aquel equipo y hoy disfrutan de sus últimos pasos como futbolistas ligas menores.

Mientras se prepara para ser entrenador (quién sabe si del Barça), Xavi Hernández regala sus últimas lecciones en el Al-Sadd de Qatar. El de Terrassa dejó el club de su vida en el 2015 con 25 títulos en sus espaldas.

El mismo destino ha escogió Samuel Eto'o. Después de vivir una relación muy tensa con Guardiola, el camerunés dejó al Barça cuando acabó la temporada 2008/09. Inter, Anzhi Majachkalá, Chelsea, Everton, Sampdoria, Antalyaspor y finalmente Qatar Sports Club. Su trayectoria siempre ha sido sinónimo de goles y éxitos.

El recuerdo más fresco es el de Andrés Iniesta. El manchego dejó al Barça la temporada pasada y ahora es futbolista del Vissel Kobe japonés. Después de llegar al club nipón a media temporada, el excapitán blaugrana está de vacaciones y espera el inicio del nuevo curso para seguir enamorando a los seguidores de la J1 League. Eso sí, en varias entrevistas ha reconocido que le gustaría ser entrenador.

Banquillos y despachos

Algunos de los futbolistas de aquel equipo han seguido estrechamente vinculados al fútbol, pero no desde dentro del terreno de juego, si no desde los despachos.

El mítico lateral izquierdo del grupo, Éric Abidal, ahora vuelve a trabajar en el club. Después de superar un cáncer y una salida uno tanto accidentada del Barça, Abi ejerce como secretario técnico, en un cargo que comparte con Ramon Planes.

Éric Abidal Jodri Mestre Pep Segura Barça Efe

EFE

Quien también formó parte de la secretaría técnica blaugrana fue Carles Puyol. El eterno capitán se tuvo que retirar por culpa de las lesiones y el club le ofreció una plaza próxima al secretario técnico, que en ese momento era Andoni Zubizarreta. Cuando este fue destituido por los malos resultados del equipo de Luis Enrique, Puyol también dejó su cargo.

Otros, en cambio, han empezado una carrera como entrenadores. Es el caso de Thierry Henry. El francés fue ayudante del catalán Robert Martínez en la Selección belga durante el Mundial de Rusia y el pasado mes de octubre se hizo cargo del Mónaco, el club con el que debutó como jugador.

Otros futbolistas del Barça de Guardiola también se han acercado a los banquillos, aunque de manera más discreta. Sylvinho es el segundo entrenador de la Selección de Brasil de Tite, mientras que Víctor Valdés dirige el juvenil de la ED Moratalaz.

Secundarios con vidas muy diferentes

Futbolistas con menos trascendencia dentro de aquella plantilla han seguido caminos muy diversos. Bojan Krikic, que entonces sólo tenía 18 años, ahora es uno de los delanteros del Stoke City, de la Segunda División inglesa.

Albert Joquera está en el punto de mira del nuevo propietario de la Andorra FC, Gerard Piqué. El central catalán tiene claro que comprará el club del Principado y podría apostar por el exportero de Guardiola para que entrene al equipo andorrano junto con el exblaugrana Gabri.

Otro portero, en este caso el que ejercía como suplente de Víctor Valdès, ha olvidado el fútbol y se ha dedicado a otra de sus pasiones, la música. José Manuel Pinto ahora es productor musical y se hace conocer como Wahin, su nombre artístico, y además se dedica plenamente a cultivar su cuerpo.