Paulinho Bezerra, con un gol en el minuto 84, mantiene al Barça líder de Primera División y le da la cuarta victoria en cuatro partidos de Liga. Los blaugrana remontan el 1-0 del Getafe gracias a la intervención de Ernesto Valverde desde la banda. El partido deja, como nota negativa, la lesión muscular de Ousmane Dembélé. El Real Madrid puede quedar a siete puntos si pierde este domingo contra la Real Sociedad.

Sin rotaciones

Valverde pronosticó algún cambio en la previa del partido pero no ha cumplido su 'promesa'. El entrenador extremeño ha salido al campo del Getafe con el mismo once que ganó y convenció contra la Juventus de Turín, incluyendo un solo cambio: Sergi Roberto por Nélson Semedo en el lateral derecho.

El Barça estaba ante una oportunidad única. Y no lo ha interiorizado. El equipo sabía que una victoria tenía mucho más valor que tres puntos, después de ver el mal inicio del Madrid. Y no lo ha exteriorizado.

El Getafe, con un plan simplista pero ejecutado a la perfección, ha conseguido neutralizar el juego de un Barça lento, sin ritmo ni velocidad en las piernas. Las jugadas de ataque de los blaugrana se perdían por la línea de fondo o entre la multitud de piernas de futbolistas madrileños. Ousmane Dembélé volvía a empezar en la banda derecha, mostrando voluntad pero evidenciando falta de comprensión en el particular juego de posición. 

Gerard Piqué sufría a la hora de tapar su espalda y Jorge Molina lo traía de cabeza. El delantero del Getafe ha conseguido cargarlo con una tarjeta amarilla cuando sólo se habían jugado diez minutos después de un túnel espectacular. A los de Valverde les costaba mucho trenzar jugadas y tenían nula profundidad en ataque. El inicio recordaba a algunas salidas de infausto recuerdo de la temporada pasada.

Dembélé no guardará un buen recuerdo de este 16 de septiembre. El delantero francés, cabizbajo, ha pedido el cambio en el minuto 25 después de sufrir un tirón en la parte posterior del muslo izquierdo. Cambio obligado. Entraba Gerard Deulofeu para mantener el esquema, con Luis Suárez desplazado a la banda izquierda.

El banquillo gana

El Barça jugaba con fuego. Todos los ataques del Getafe iban acompañados de una sensación de peligro alarmante. Y al final se ha quemado. Ter Stegen ha encajado el primer gol de esta Liga y no ha podido hacer nada para evitarlo. Gaku Shibasaki, un japonés que el año pasado jugaba en el Tenerife, ha cazado un rechace en la frontal del área para hacer de volea y al primer toque el 1-0. Resultado justo.

La apatía del Barça costaba tres puntos. Leo Messi era plenamente consciente de que el equipo lo necesitaba. Y es por eso que retrasaba su posición, buscando arreglar una circulación de pelota completamente inocua. El equipo se encomendaba, otra vez, a su talento. Guaita, portero del Getafe, ha mantenido el 1-0 al descanso después de una parada descomunal a un disparo de falta de Messi. El equipo tenía 45 minutos para marcar dos goles.

Denis Suárez ha dejado a Andrés Iniesta en el banquillo. Y su entrada ha dado otro aire al equipo. Denis ha respondido a la ocasión haciendo el 1-1. El gallego ha aprovechado una jugada de Roberto para controlar la pelota en el punto de penalti y, con un disparo cruzado, superar a Guaita. Empezaba un nuevo partido.

El Getafe acentuaba todavía más su planteamiento, regalando la pelota y encerrándose en el área. El Barça monopolizaba la posesión y necesitaba una chispa de talento para superar una pobladísima defensa. Paulinho ha sido la última bala de Valverde para buscar la victoria. Una apuesta ganadora.

En un contragolpe, el mediocampista brasileño, ha expuesto sus mejores virtudes. Paulinho ha aguantado la entrada de un defensa del Getafe para entrar en el área con la pelota controlada y lanzar un disparo que ha pasado rozando los guantes de Guaita. 1-2. Remontada trabajada gracias a la exhibición de potencia de un jugador que ahuyenta fantasmas.

El equipo ha conseguido, con más pena que gloria, mantener la ventaja para sumar 12 puntos y seguir, una jornada más, como líder de Primera.