El Barça de fútbol sala derrotó este viernes el KPRF ruso en la semifinal de la Champions, disputada en el Palau Blaugrana, por 5 a 4 en la tanda de penaltis después de haber empatado a 3 en el tiempo reglamentario. De esta manera, los culés rompieron en maleficio de la penúltima ronda de la competición, en la cual habían caído en las dos últimas ediciones, y consiguieron un billete para enfrentarse a ElPozo Murcia en la final de este domingo, la primera entre equipos de la liga española de la historia, que también acogerá el Palau.

Los de Andreu Plaza consiguieron situarse 2-0 en el marcador con goles de Sergio Lozano, gracias a un misil, y de Ferrao, que firmaba el segundo en el minuto 8. En el último minuto del primer tiempo, sin embargo, un error de los azulgranas lo aprovechó el KPRF –equipo del partido comunista y actual campeón ruso– para situar el 2-1.

En la segunda parte, los visitantes empataron el duelo gracias a Asadov y estuvieron a punto de dar la vuelta al marcador, pero el Barça mantuvo el pulso y llevó al partido a la prórroga. En esta fase los azulgranas se volvieron a avanzar de la mano de Esquerdinha, pero los rusos empataron de nuevo a 11 segundos del final.

Finalmente, después de una tanda de penales donde sólo falló el exculé Lin, el Barça certificó el acceso a una final que no disputaba desde el 2015. El domingo buscará levantar su tercera Champions.