"El todo o la nada en Granada" se podría titular la historia de esta Liga. Ganó el Barça el derbi al Espanyol por goleada con tantos de MessiSuárez (2), Rafinha y Neymar. Perdió el Atlético de Madrid en Levante y abandonó la lucha por el título. Venció el Madrid por la mínima al Valencia en el Bernabéu y quedó a un punto del líder. El Barça acude a Granada como líder solitario. Si gana, el título es suyo. Y haciendo el mismo resultado que el Madrid, que juega en campo del Deportivo, también revalidará el título. Sería la octava vez en los últimos 16 años.

El último partido de la temporada en el Camp Nou sirvió para dar un emocionante homenaje a Manel Vich, el hombre que anunciaba las alineaciones en el Estadi, para ver un espectacular gol de falta de Leo Messi, y para que Luis Suárez aumentara su cuenta goleadora con dos tantos que acabaron sellando un triunfo contundente sobre el Espanyol. Y, especialmente, para que el público del Camp Nou despidiera a un equipo que esta temporada le ha dado, de momento, el título de la Supercopa de Europa, el Mundial de Clubs y dentro de dos domingos aspira a coronarse campeón de la Copa del Rey.

Con predeterminación

Con mucha más decisión, llevando la iniciativa desde el minuto inicial y más motivado que durante la primera parte del último partido, el Barça se fue por el derbi con más ánimo para acabar redondeando una manita de goles que deleitó a su público. Marcó a los ocho minutos gracias a una falta directa de Messi, después vio como el árbitro le anuló un gol a Rakitic y pasó por alto un penalti sobre el astro argentino. Podía haber sido una goleada escandalosa porque el Espanyol acusó las bajas y no tuvo con qué atacar al Barça.

Sobre el terreno de juego, el Barça se encontró un Espanyol conservador, se defendió mucho y pegó más, hasta el punto que se fue al descanso con cuatro jugadores amonestados. El ir con todo al choque fue quizás la única característica propia de un derbi, porque del resto el partido resultó tan frío como el ambiente, que sólo se calentó metiéndose con Pau López portero del Espanyol.

El último partido del Camp Nou tenía como principal aliciente la posibilidad de ver al Barça coronarse campeón de Liga siempre y cuando el Atlético perdiera en Levante y el Madrid empatase en su campo ante el Valencia. Pero aunque al minuto de juego, los rojiblancos anunciaban pelea hasta el último minuto, al final de la jornada fueron los grandes perdedores de la penúltima jornada. Perdieron con un equipo que está ya en Segunda y tiraron la toalla. 

Conocedor de que el título de Liga depende sólo de él, el Barça encaró el derbi con notable determinación. Cierto es que el equipo no goza ni crea excesivas ocasiones de gol como en los mejores tiempos del tridente, pero lo que hizo a la perfección fue presionar al Espanyol y recuperar el balón con rapidez.

Dominio a placer

Dominó el partido el Barça a placer, sobre todo desde que Messi perforó la portería de Pau López con una falta espectacular a los ocho minutos de juego. Y respiró más tranquilo el Estadi y el barcelonismo en general cuando en el minuto 52, Alves, extraordinario todo el partido, recuperó un balón, lo cedió a Messi y el argentino de primera lo cedió a Suárez, que no falló en el uno contra uno con el portero blanquiazul.

Fue el comienzo de un recital de juego y de goles. Volvió a marcar Suárez y hasta Rafinha, aprovechando un fallo clamoroso de Pau López. Neymar redondeó la manita de goles al Espanyol para ir a Granada abrazando el título de Liga.

 

Alineaciones

Barça: Ter Stegen; Alves, Piqué, Mascherano, Alba (Mathieu 70 m.); Busquets, Rakitic (Rafinha 72), Iniesta (Arda, 72); Messi, Suárez y Neymar.

Espanyol: Pau López; Javi Pérez, Roco, Duarte, Víctor Alvarez; Cañas (Montañés, 71), Diop, Víctor Sánchez, Hernán Pérez (Correa, 66); Asensio y Caicedo (Gerard 46).

Árbitro: Gil Manzano (extremeño). Amonestó a Messi, Hernán Pérez, Diop, Víctor Alvares, Cañas, Javi López, Pau López, Guerra.

 

Els gols

1-0 Messi

2-0 Suárez

3-0 Suárez

4-0 Rafinha

5-0 Neymar