Nunca quiere ser protagonista, lo ha demostrado durante toda la temporada, y quiso seguir con su papel de secundario en la rúa de los campeones. Hansi Flick, que se ha estrenado con tres títulos en su primer curso como entrenador del Barça, quiso ser discreto y responsable, pero también acabó siendo el protagonista involuntario de una celebración de masas por las calles de Barcelona.

Hansi Flick, un entrenador discreto

"Tengo que decir esto. Nos sentimos como una auténtica familia. Esto me ha ayudado a ser feliz y a trabajar con mucha pasión. Nunca en la vida me había sentido así", dijo desde la sala de prensa del RCDE Stadium después de ya ser campeón de Liga. Un hombre tranquilo, humilde y que sabe qué es esforzarse para conseguir el éxito. Y en can Barça, a fuerza de trabajar mucho, ha conseguido volver a ilusionar a los culés.

El entrenador del Barça ha vuelto a ser un técnico que ha esquivado los focos, que se ha mostrado muy responsable y que no ha desfallecido ningún día hasta que ha llegado el tan esperado éxito. Muchos días para recuperar la mejor versión de un equipo lleno de jóvenes, y sabiendo resistir la presión y las críticas cuando también han aparecido. Por esto en el día de la celebración quiso dejar el papel protagonista a los futbolistas, aunque en cierta manera también acabó siendo uno de los destacados de la rúa.

Hansi Flick desfile Barça / Foto: Europa Press
Hansi Flick saludando / Foto: Europa Press

Los momentos estelares de Hansi Flick en la rúa del Barça

Si vimos como Fermín, Szczesny, Iñigo Martínez, Raphinha o Lamine Yamal fueron de los más aclamados durante la tarde de fiesta que se vivió por las calles de Barcelona, allí también se encontraba Hansi Flick, el líder del Barça en la sombra y quien vigilaba y también lo controlaba toda desde su posición más escondida. Pero siempre dominando cualquier situación y sabiendo qué decisión tomar en todo momento.

Se vio a un Flick protector, ya que cogió de la camiseta a Fermín para que no cayera en un momento de euforia máxima del joven futbolista culé. También tuvo tiempo para hacer videollamadas con familiares y les mostró en primera persona la celebración culé. Y, todavía con el móvil en la mano, haciendo muchos vídeos y fotos de este día histórico y que siempre recordará. Un Hansi Flick tranquilo que se vio saturado en ciertos momentos de la celebración, sin embargo, en definitiva, fue uno más de la fiesta. Y en todo momento tenía una sonrisa de oreja a oreja mientras controlaba a sus jugadores.

 

El entrenador alemán, un poco más permisivo, ha dado más margen para el entrenamiento de este sábado, pero ya pensando en el próximo partido contra el Villarreal, ya que su trabajo esta temporada no acabará hasta la próxima semana con la despedida del curso en San Mamés contra el Athletic Club.