Al Real Madrid le ha salido un problema muy grave en la cantera, con un jugador que estaba destinado a ser importante, en especial, en la presente campaña. Porque Iker Bravo fue firmado como una de las grandes promesas del fútbol mundial, y esperaban que tuviera un gran impacto. Aunque Florentino Pérez era consciente de su juventud y su poca experiencia, confiaba en las increíbles habilidades que atesora para abrirse paso en el primer equipo, y convertirse en un recambio fiable.
Sin embargo, en su primera campaña no llegó a entrar en ninguna convocatoria de Carlo Ancelotti. De hecho, fue suplente habitual en el filial, dirigido por Raúl González Blanco. Jugó poco, y cuando estuvo sobre el terreno de juego, demostró estar muy ‘verde’ para competir en Primera RFEF. No es casualidad, por lo tanto, que el técnico italiano apostara por Álvaro Rodríguez antes que por el internacional español sub 19 cuando necesitó a un ariete.
La actual temporada era un momento decisivo para el ex del Barça y del Bayer Leverkusen, que después de la salida de Karim Benzema, tenía una oportunidad irrepetible para derribar la puerta del Santiago Bernabéu, y demostrar que puede llegar a ser un crack de primer nivel. Pero ni siquiera realizó la pretemporada con los profesionales, y decidieron que lo mejor para su progresión era bajarlo al Juvenil A de Álvaro Arbeloa.
En el Castilla no le podían garantizar minutos, y por lo tanto consideraron que lo más positivo era seguir con su evolución en la División de Honor. Pero Bravo ha decepcionado por completo, y ha seguido siendo incapaz de marcar las diferencias. Su nivel no ha convenido en absoluto, y además ha recibido varias expulsiones. En el Madrid no están satisfechos con la progresión que ha tenido, y están hartos de los aires de estrella de un jugador que tan solo tiene 18 años, y aún no ha demostrado nada en su carrera.
Así que Ancelotti tiene decidido que no le permitirá debutar con el primer equipo, y su continuidad en la capital de España es muy complicada, pues recordemos que está cedido.
10 millones de euros, un precio que Florentino Pérez no está dispuesto a pagar por Bravo
Tampoco ayuda el elevado precio que tiene Bravo, por el cual incluyeron una opción de compra, valorada en 10 millones de euros. Una cifra que Florentino Pérez no se plantea pagar en ningún caso, pues no tiene espacio en el Madrid.
Y en el BayArena tampoco cuentan con Iker, quien deberá de buscarse otro club en verano…