El Paris Saint-Germain nunca deja de tener un ojo en el mercado. A pesar de haber recuperado el liderato de la Ligue 1 después de los pinchazos del Niza, en la Champions, el trofeo más ansiado por Nasser Al-Khelaïfi, las cosas no van como esperaba. A falta de una jornada para que acabe la fase de grupos, el equipo de Luis Enrique se encuentra segundo por detrás del Borussia Dortmund. Con la posibilidad, además, de ser eliminados dependiendo de la combinación de resultados que se dé.
Por este motivo, en el PSG ya están buscando cómo reforzarse. Lo que ha provocado que en las últimas horas hayan acelerado el fichaje de una de las grandes perlas del fútbol brasileño, Gabriel Moscardo. Según Sport, el director deportivo del club parisino, Luis Campos, está ya en São Paulo para negociar con los directivos del Corinthians.
Moscardo se despide del Barça
Según la misma fuente, de momento no hay oferta formal por el brasileño, pero ya se calcula que el precio del traspaso podría estar alrededor de los 25 millones de euros. Precisamente, la cifra que el Chelsea le puso sobre la mesa al conjunto brasileño en su última proposición. Esta fue rechazada por la inminencia de las elecciones a la presidencia del club paulista.
A pesar de la insistencia de varios clubs, entre los que se encuentra el Barça, el pivote de 18 años se incorporará a las filas del PSG. Después de pasar todos los filtros internos del club, el fichaje del brasileño ha sido aprobado. De hecho, el club francés ya tiene un acuerdo salarial cerrado con el jugador. Por lo que solo quedará entenderse con el club para concluir una operación que ya se da prácticamente por hecha.
Xavi se queda sin un gran refuerzo
El fichaje del brasileño supone un golpe sobre la mesa por parte de Al-Khelaïfi. Después de ver cómo el Real Madrid le quitaba en sus narices a Endrick, Luis Campos no ha querido dar margen de error y se ha lanzado a por el mediocentro. Esta ventaja en la negociación se ha dado también gracias a la inacción del Barça a través de Deco, que ante la falta de recursos económicos no tenía capacidad para presentar una oferta adecuada.
Xavi Hernández se queda así sin uno de sus refuerzos más deseados. La salida de Sergio Busquets el pasado verano ha sido un mazazo para el juego del equipo. La llegada de Oriol Romeu parecía que resolvía el problema, pero rápidamente se ha visto que el ex del Girona no tiene nivel suficiente para ser titular. Con el fichaje del brasileño, se podría haber cerrado una carpeta que estará abierta durante muchos años en el Camp Nou si no se da una respuesta rápida.