Alianza Editorial presenta un libro que trata de explicar uno de los fenómenos que más preocupa a los ciudadanos:, la corrupción. La corrupción en España. Un paseo por el lado oscuro de la democracia y el gobierno es un conjunto de estudios coordinados por Víctor Lapuente, de la Universidad de Göteborg. Este libro intentar ir más allá de la simple descripción de casos de corrupción, y analiza las dinámicas políticas y sociales que fomentan los comportamientos corruptos. Todos los estudios son realizados por prestigiosos sociólogos.

Una panorámica

El libro se inicia con un estudio sobre la presencia de corrupción en el Estado español, a través de una serie de análisis estadísticos sobre determinados elementos relativos a la corrupción. A través de estos datos se puede constatar que en España el volumen de corrupción es bastante elevado, en relación a los países de nuestro entorno (aunque inferior al de la mayoría de países pobres). Y, a pesar de todo, la corrupción no afecta por igual a todos los niveles de la sociedad. Existe mucha corrupción en las altas esferas, pero en cambio los ciudadanos no perciben corrupción en su entorno, porque afecta poco a los escalones a más bajos de la administración. Además, los estudiosos destacan que en España hay tanto rechazo a la corrupción como en la mayoría de los países europeos: las prácticas corruptas no serían una costumbre propia del país, como algunos argumentan, sino que es una lacra rechazada colectivamente.

Un problema sistémico

De los estudios del libro se deduce que la corrupción, en España, no es un problema coyuntural, sino una práctica sistémica. La corrupción tendría que ver con varias cuestiones: la financiación de los partidos políticos, la relación entre funcionarios y políticos, el sistema electoral, la baja tasa de militancia, las relaciones históricas entre empresarios y políticos, la burbuja inmobiliaria, el problema de los municipios... No se trataría de que algunos políticos se hayan corrompido, sinó que es el sistema el que está podrido.

Funcionarios y políticos

España es un territorio donde mandan mucho los abogados del Estado integrados en la llamada "Brigada Aranzadi". Los autores del estudio constatan este hecho, y apuntan que en realidad, la separación entre la función pública y la política es una de las bases para frenar la corrupción, tal como demuestra la experiencia de países con poca presencia de corrupción. En este sentido, España está muy lejos de los parámetros de los países desarrollados: es demasiado frecuente el paso de la función pública a la política y viceversa. Y el contrato de asesores y de cargos de libre designación ayuda todavía más a los comportamientos corruptos.

Ineficacia en la persecución

Los autores dejan bien claro que la persecución de los corruptos no ha sido suficiente como para disuadirlos (una cosa que día a día nos confirman los noticiarios). Los mecanismos policiales, fiscales y judiciales utilizados contra los corruptos no son eficaces, y los autores proponen una reforma en profundidad de la justicia para acabar con eso. Pero también apuntan que las instituciones tienen que apostar por políticas de transparencia que tiendan a prevenir la corrupción. No se trata sólo de perseguir, sino de prevenir. Lo más grave es que los autores detectan que la reforma del Código Penal del 2015 no ha mejorado las herramientas para castigar la corrupción, sino que las ha limitado. En realidad, ayuda a los corruptos.

Los partidos, el problema pendiente

Uno de los problemas más graves que están en el origen de la corrupción es el bajo nivel de afiliación de los partidos. Eso supone la escasa disposición de recursos, y la necesidad de buscar más incluso al margen de las vías legales. Los estudios detectan un alto número de irregularidades, como la financiación de los partidos a través de las fundaciones, la falta de presentación de cuentas, el elevado nivel de endeudamiento de las formaciones... Los autores apuntan, a pesar de todo, que la situación mejora poco a poco. Lo que es más importante para ellos, es que la ciudadanía reacciona cada vez más, y que la judicatura empezar a ser más beligerante en este tema.

Corrupción sin castigo electoral

Una de las cuestiones que analizan a los autores es la eficacia de la democracia como freno para la corrupción. Constatan que en España muchos partidos y personajes sospechosos de corrupción no han sufrido castigo electoral o lo han sufrido de una forma muy limitada. Y comparan esto con acontecimientos de otros países, como Estados Unidos o Brasil, donde se han producido situaciones análogas, también con escaso castigo electoral para los corruptos. Los autores argumentan que parte del problema proviene de los medios de comunicación, que no informan de forma objetivo, pero parte de culpa la tiene también el sistema electoral, que favorece las maquinarias partidistas.

Recomendaciones

Los autores del informe afirman que la corrupción es evitable. Afirman que en algunos países hay un nivel de corrupción prácticamente imperceptible. Aseguran que esta situación es reversible, pero no puede cambiar de golpe, sino que hay que implementar medidas muy complejas a medio y largo plazo.

Una visión integrada

Este libro no es una simple compilación de estudios sobre un tema determinado, sino un conjunto de textos perfectamente articulados que pretenden explicar aspectos poco conocidos del problema. Además, aporta una visión comparativa, que es muy enriquecedora. Y aporta propuestas concretas de lucha contra la corrupción. Los autores apuntan una idea esencial: luchar contra la corrupción no es tanto cuestión de que gobiernen los "buenos", sino de impedir que los corruptos, vengan de donde vengan,- puedan seguir haciendo sus fechorías. Un libro básico para los interesados en el tema.