Care Santos retorna a la novela en una obra para adultos, escrita en catalán, Todo el bien y todo el mal (editorial Columna). El personaje central, la Reina, es una mujer que "lo tiene todo", y que se pensaba que lo tenía todo resuelto, pero su vida perfecta se desmonta cuando se entera, mientras está en el extranjero, que su hijo adolescente se ha intentado suicidar. A través de esta obra Santos hace toda una reflexión sobre la maternidad, pero también sobre la vulnerabilidad. Y por eso busca un escenario donde la gente es terriblemente vulnerable, el aeropuerto. Allí, con su móvil, la protagonista tratará de mover todos los hilos posibles para resolver una situación que es, de hecho, irresoluble, pero a través de sus conversaciones removerá un montón de elementos de su pasado que pondrán de relieve una vida no tan ideal.

La madre que se siente culpable

Care Santos reconoce que Reina Gené es un personaje que podría despertar una cierta animadversión a las primeras páginas, pero afirma "que el lector la acaba entendiendo". En el fondo quiere ser un homenaje a las "madres imperfectas", las mujeres que son madres, que trabajan, que tienen mil ocupaciones y que no llegan a todo aunque a veces se sienten culpables por no llegar y por no cuidar suficientemente bien a sus hijos. Santos aborda la complejidad de ser madre de adolescentes, una complejidad que reconoce: "son seres que entran al mundo de los adultos, y el mundo de los adultos es un mundo de secretos". Y por lo tanto, para la escritora los adultos siempre resultarán crípticos para sus progenitores.

Ser padres

Esta es una novela que se planteó como una obra sobre la maternidad, pero que también gira en torno a la paternidad. En ella se plantea el tema del suicidio juvenil, un problema que angustia a muchos padres. En realidad, Santos está convencida de que los padres no tienen que ser amigos de los jóvenes, y de que este tampoco es el papel que les corresponde. Pero Santos no ha querido hacer una novela dominada por el tono intimista, y ha preferido darle un punto de suspense. Y ha anunciado ya que tendrá una continuación "Seguiré tus pasos", porque "quería hacer una sola novela que agrupara las dos historias, pero tuve que reconocer que era excesivo".

Una novela sobre jóvenes, pero no para jóvenes

Santos, madre de tres adolescentes, y dedicada a menudo a la divulgación de la lectura a la enseñanza secundaria, quería escribir "una novela sobre adolescentes que no podía publicar como literatura para jóvenes". En realidad, aunque ella es autora de muchas obras de literatura juvenil, se muestra muy crítica hacia los "libros de prescripción", aquellos que recomiendan a las escuelas, que según ella, están marcados muy condicionados por lo que quieren los maestros y los padres, y están muy acondicionados por estos, y no por lo que gusta a los jóvenes. Care Santos afirma que, actualmente, incluso habría tenido problemas el Mecanoscrit del segon origen, de Manuel de Pedrolo.