Brazos en jarras y un cabreo monumental. Todos hemos recibido una bronca así de los padres. Haz esto, haz aquello. Te pasas todo el día con… Levanta de ahí. La verdad, el anuncio está logrado. El pov es ideal: un plano medio, algo nadir, en el que se ve a una madre como si el espectador estuviera recostado en el sofá. Levanta de ahí. El trabajo está a tu alcance, a descargarte la app. Así reza un spot de una plataforma de anuncios de trabajo. Si no lo consigues, es porque no quieres. Si no tienes depresión postvacacional es que eres demasiado vago, como buen joven, incluso para haberte antes buscado un curro para tenerla. 

Si no lo consigues, es porque no quieres. Si no tienes depresión postvacacional es que eres demasiado vago

Son días de vuelta al ruedo. Días en que los medios ofrecen la información que necesitamos, y en muchos casos, también la que no. Es más bien la que ellos necesitan, la que les procura supervivencia. Lo de la creación de contenido al gusto del click no va a ser nueva de YouTube. Cuando llega Navidad, los precios del marisco, sorpresa, aumentan. Por Sant Joan, ristra de consejos chorra sobre cómo no quemarse con las bombetas o los perros y los petardos. Y después de vacaciones, no falla: tips para una mejor reentré.

Cuando llega Navidad, los precios del marisco, sorpresa, aumentan. Por Sant Joan, ristra de consejos chorra sobre cómo no quemarse con las bombetas o los perros y los petardos. Y después de vacaciones, no falla: tips para una mejor reentré

Nueva-vieja rutina

Hay diferencia entre estos últimos artículos de unos años a esta parte: antes todo eran vaguezas sobre encarar diferente el regreso, ahora nos invitan a gestionar mejor las emociones, y poco a poco se incluyen más especificidades de práctica de una buena salud mental. Algo es algo. Pero siguen mandando los titulares buenistas y muy muy dispersos: cómo ir poco a poco, adaptarnos a la nueva-vieja rutina y, si la cosa se alarga, como dictan las prescripciones de los medicamentos, consultar a un experto. Todos estos musts parecen para un público generalista, transversales y para toda la familia. Como el catálogo de Netflix. Pero de la misma forma que Netflix no es para todo el mundo, sino para quien puede pagarlo, los trucos de la vuelta al trabajo tampoco lo son. Son para los que tienen un trabajo.

Netflix no es para todo el mundo, sino para quien puede pagarlo, los trucos de la vuelta al trabajo tampoco lo son. Son para los que tienen un trabajo

Y si bien los datos demuestran que el paro afecta a casi todos, se ceba más con los jóvenes (casi el 28% de menores no encuentran trabajo según datos oficiales del Gobierno). Pero no es lo mismo la realidad que la visión que se tiene de ella: los jóvenes, además de no tener trabajo, ¡no lo quieren! Así lo lleva difundiendo la cultura mediática desde el exitoso concepto ni-ni. El enjuga conciencias políticas del “ni estudia, ni trabaja”. Parecía parte del pasado, pero no. He vuelto a poner Neox todo el día. Me he zampado y empachado de Big bang theory, Friends y –la TDT da para otro artículo– Los Simpsons. Todo para ver si el comercial había sido un sueño. He rezado para que así fuese. Porque ni rastro del “brazos en jarras y un cabreo monumental”.

Toda tu mierda junta

Aunque Twitter tiene otra opinión. Por lo visto, pasóSea como sea, no es la primera vez que la misma plataforma ahonda en la idea. Y eso que han intentado acercarse a la Generación X (fueron patrocinadores del equipo de esports de Ibai Llanos, KOI), la misma a la que ahora le dicen: levanta de ahí. La misma a la que le hablan de forma uniforme; una generación que, como todas, no lo es. Los habrá siempre a gustito en el sofá, vida y distracción a golpe de reels, de la misma forma que los hay dándole al journaling o al put your shit together.

Hay algo que sí que iguala a la generación presente con las anteriores y las venideras, el edadismo sufrido: la plataforma le habla con paternalismo a los jóvenes

Hay algo que sí que iguala a la generación presente con las anteriores y las venideras, el edadismo (discriminar por cuestiones de edad) sufrido: la plataforma le habla con paternalismo a los jóvenes. Eso de que el punk, el trap o –ponga aquí el estilo nuevo que quiera– el autotune no son música. Peor que tener depresión postvacacional es no poder tenerla y tener que estar en casa de tus padres, en la misma habitación donde los peluches duermen en cajas, las baldas empiezan a panear y la puerta sigue teniendo las letras con borlas que deletrean tu nombre.