Sant Pau. Patrimoni modernista. Barcelona es un libro que acaba de publicar Enciclopèdia Catalana, con el apoyo del Ajuntament de Barcelona y la Fundació Privada Hospital de Sant Pau i de la Santa Creu. Con este libro se quiere hacer una presentación pública del recinto modernista de Sant Pau, que recientemente ha sido restaurado y que desde 2014 se ha convertido en una atracción turística, que forma parte de las principales rutas modernistas de la ciudad de Barcelona y que es visitado por miles de turistas mensualmente. Este edificio es la obra modernista mayor de Catalunya y desde 1997 ha sido catalogada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Visiones insospechadas

Una de las grandes virtudes de este libro es que nos ofrece muchas fotografías del hospital. Hay las clásicas: la entrada, los principales pabellones, los jardines... Pero incorpora también imágenes desconocidas para la mayoría de los barceloneses. Robert Ramos ha retratado las perspectivas más desconocidas del edificio: la escalera de caracol del reloj, los pasadizos subterráneos, los antiguos quirófanos... El fotógrafo presta mucha atención a los detalles: los motivos heráldicos, la forma de las bóvedas, detalles de las esculturas, las agujas que coronan los edificios, las baldosas de los mosaicos, las gárgolas, las tejas, los tiradores de las ventanas... Ramos consigue hacer fotografías de elementos del hospital desde ángulos muy sugerentes. Y, además, se nos ofrecen algunas magníficas imágenes aéreas del conjunto, que permiten una visión inaudita del hospital como un todo. Es una pena que los textos de la obra no estén a la altura: parece que había una cierta voluntad de que la espectacularidad de la obra se limitara a las fotografías y no alcanzara al texto.

Un hospital singular

El Hospital de Santa Creu i Sant Pau es un conjunto de 27 pabellones (de los 48 que se habían previsto), que sigue las tendencias más modernas de la arquitectura hospitalaria de la época. Fue construido por Lluís Domènech i Montaner y su hijo, Pere Domènech i Roure. Además de la obra arquitectónica, en sí, el hospital incorpora numerosas obras de los mejores artistas y artesanos de la época: mosaicos, esculturas, forja, vitrales... Durante el franquismo, se incorporaron muchos elementos arquitectónicos nuevos para hacer los edificios funcionales como hospital moderno, pero estas reformas lo desvirtuaron en tanto que obra de arte. La reciente restauración ha devuelto al hospital su aspecto original.

¿Para quién?

Este libro es un libro regalo. Y como tal, en él las fotografías juegan un papel central. Uno de los elementos más inquietantes de este libro es que, básicamente, nos presenta edificios vacíos; y eso se ve desde la propia portada. Las grandes obras de arquitectura, esmeradamente decoradas, concebidas para atender a enfermos, han perdido toda funcionalidad y se han convertido en simples paredes para admirar. Una construcción pensada con una finalidad social se ha convertido en una fantasmal instalación destinada a turistas, de la que los ciudadanos han quedado excluidos. Los textos del libro son meramente informativos, con bien poco carácter, y las fotos son magníficas, pero de postal, sin alma. El libro es de una gran belleza, pero provoca desazón. Por desgracia, refleja a la perfección en qué se ha convertido en el Hospital de Sant Pau, y qué está pasando con la ciudad de Barcelona.