La Fundació Tàpies ha organizado un ciclo de performances e instalaciones, Someone Walking Around, coordinado por el artista belga Erich Weiss. Un proyecto que incluye una instalación, Autonomous Colours, del artista eslovaco Roman Ondak, que constituye una reflexión sobre la situación política de Catalunya y sobre el independentismo.

Inspirado en el Tàpies más político

Ondak (1966) es eslovaco, y por lo tanto conoce bien los problemas nacionales (en realidad, cuando nació su país formaba parte de Checoslovaquia). Y se siente muy satisfecho de su nacionalidad: aunque tiene una amplia carrera artística internacional, no quiere vivir fuera de su país (argumenta irónicamente que como son tan pocos artistas eslovaco no puede abandonar su tierra). Autonomous Colours no fue un encargo, sino que la temática fue escogida libremente por el artista eslovaco, tras inspirarse en la obra más política de Tàpies. Con esta obra Ondak quería manifestar la simpatía que siente hacia las reivindicaciones de los catalanes.

roman ondak performances Tàpies

Las banderas ausentes

La intervención de Ondak consiste en introducir una serie de objetos muy pequeños (tejas de cobre del tejado de su casa) por todo el museo (dentro y fuera de las salas de exposición). Estas piezas se transforman en banderas de regiones europeas que en estos momentos están reivindicando su independencia (Catalunya, el País Vasco, Córcega, pero también otras menos conocidas). Ondak ha querido hacer una intervención "sutil en el espacio". El comisario Erich Weiss señala que la intención es que los visitantes se encuentren las piezas de Ondak en diferentes lugares. Sería una instalación, "como un pequeño toque" y lo compara con los lazos amarillos "que se ven o no se ven y que cuando se ven se pueden interpretar". La intención, según Weiss, es "que no sean nada agresivos".

De lazos y banderas

Ondak se muestra muy interesado justamente por la polémica sobre los lazos amarillos. Anunció que le sorprendía "que un lazo amarillo pueda generar tanto debate", porque "al fin, un color no és más que un color". Y defendía este símbolo, alegando que "usar un color para defender alguna cosa no es ninguna agresión". La intervención de Ondak se presentó el pasado viernes, junto con la instalación Kaleidoscope, del artista salvadoreño Nils Nova, que también ofreció la performance D.E.A.D. En la terraza de la Fundació Tàpies, junto a la emblemática escultura del calcetín de Tàpies, se podrá ver durante tres meses el Kaleidoscope de Nova, que consigue transformar por completo el espacio.

Performance Nils Nueva Fundación Tapias

El museo, de otra manera

El ciclo de performances e instalaciones está destinado a atraer, principalmente, al público local, al que le cuesta ir a los museos. Son instalaciones semipermanentes, de corta duración, "como un acento en el espacio del museo", según el comisario. Con estas actividades se propone motivar al visitante ofreciéndole "una cosa extraordinaria", en palabras de Weiss. Los cuatro invitados de esta edición del Someone Walking Around son cuatro artistas que ya tienen una carrera consolidada: han expuesto en la Bienal de Venecia o han pasado por el Princesa Sofía, el MOMA o la Tate Gallery, pero no han mostrado su obra en Barcelona. El viernes 10 de mayo, a las 19h, se presentará A Square Without Corners, de Germaine Kruip, y el viernes 10 de mayo, Kissing Through Glass, de Jirí Kovanda.