Los teatros públicos y privados de Catalunya han advertido hoy, a través de un comunicado, que la reclamación del Ministerio de Hacienda del IVA de las subvenciones de años anteriores pone en riesgo todo el sector cultural. Las productoras cinematográficas también están en peligro. Hasta ahora las subvenciones otorgadas para el fomento de la cultura habían sido consideradas no sujetas a IVA por todas las administraciones públicas, amparándose en la Ley del IVA. Ahora, el Ministerio de Hacienda continúa una campaña de inspecciones para cobrar el IVA de las subvenciones de ejercicios anteriores. Al Festival Temporada Alta de Girona se le reclama un millón de euros, al Teatre Lliure 1,3 millones y al MACBA 1,1 millones. El Temporada Alta ha advertido que podría verse obligado a cerrar si tiene que pagar esta cantidad. La Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals también está en riesgo: se le exigen 167,4 millones de euros, correspondientes a los ejercicios 2015, 2016 y 2017.

¿Contra la ley?

Algunos agentes del mundo cultural consideran que estas inspecciones contravienen la última ley en este ámbito. El 9 de noviembre se aprobó en el Congreso de los Diputados la Ley 9/2017 de Contratos del Sector Público, que introducía una disposición en que se dejaba claro el criterio de no sujeción al IVA de las subvenciones a la cultura. Pero la nueva norma no se ha aplicado con criterio retroactivo.

Recursos

Productores Audiovisuales Federados (PROA), la entidad sin ánimo de lucro que gestionó Catalan Films & TV en años anteriores, ya abonó 70.000 euros esta semana por el IVA atrasado. Los reclamarán, pero temen que en el mejor de los casos puedan pasar 3 o 4 años hasta que se haga efectivo el retorno. Ante esta situación el Institut de Cultura de Barcelona (ICUB) propone una estrategia conjunta de todas las entidades públicas afectadas. Les ha sugerido que hagan todas las alegaciones posibles y que no paguen hasta que no haya sentencia firme. Se da la paradoja de que algunas entidades que no habían abonado el IVA habían superado inspecciones de IVA en los últimos meses.

Catalunya en el punto de mira

Estas inspecciones están afectando, sobre todo, a Catalunya, porque es donde las instituciones tienen una composición más "característica" con fundaciones y consorcios. Hay quien ha considerado estas inspecciones como un "atraco a mano armada a la cultura" y desde las redes sociales se ha considerado que esta estrategia completa el artículo 155 como un medio por amordazar cualquier disidencia. Ada Colau ha desvinculado este problema del 155, pero ha pedido por carta al ministro de Economía, Cristóbal Montoro, que detenga las inspecciones y deje de reclamar el IVA para no poner en peligro el sector cultural.