Gregory Porter se consolida como una de las mejores voces de la música negra con su nuevo disco, Take Me to the Alley

Water (2010) fue su carta de presentación. Be Good (2012) la reafirmación de su talento: jazz declinado en sedosas motas de R&B y soul, extremadamente elegante, tremendamente sugerente. Liquid Spirit (2013), su primera obra aparecida bajo el legendario sello de Blue Note, su consagración. 

El norteamericano Gregory Porter necesitó poco más de tres años y tres discos para significarse como una de las voces más significativas de la black american music, y tres más para firmar este Take Me to the Alley. El tiempo transcurrido no ha disminuido la calidad de su propuesta.

En su nueva colección de temas, Gregory Porter vuelve a evidenciar su extraordinaria habilidad para mantenerse en fiel a las formas del jazz a la vez que trascender el género. Dulce, sereno, reflexivo... un trabajo que termina mesmerizando en sus flirteos con los sonidos del soul, el funk, el gospel, el pop o, esta vez incluso, con la electrónica, destacando este "Holding On" co-escrito y grabado con los referentes de la cultura de club, Disclosure. 

Comparado infinidad a veces con figuras del calibre de Nat King Cole o Ray Charles, Gregory Porter se consolida como una de las mejores voces de la música negra actualmente y su nuevo Take Me to the Alley, un impagable regalo para los sentidos.  

Gregory Porter. Take Me to the Alley. Blue Note / Universal. Jazz.