Un grupo de amigos dedicados a un programa televisivo nocturno sobre fenómenos paranormales recorren una Barcelona plagada de cosas anormales. Es el argumento de La noche fenomenal, de Javier Pérez Andújar, una novela que se presentaba hoy y que su editora, Silvia Sesé, ha calificado de "maravillosa" en todos los sentidos de la palabra. Pérez Andújar ha anunciado que esta novela abrirá una década en que él se dedicará prioritariamente a la escritura, a la escritura de ficción. Y ha presentado el libro con mucho humor. El escritor ha asegurado que escribir libros de no ficción "le metía en un callejón sin salida", porque "la sociología me estaba devorando" y que "lo único que me podía salvar era la ficción". Ahora bien, esta novela está repleta de referentes personales: "Me he pasado a la ficción, pero estoy superatrapado".

Amigos para siempre

Con esta novela Pérez Andújar hace realidad su sueño: "Coger a todos mis amigos, mezclarlos y ponerlos en una novela delirante, haciéndoles vivir lo que no hemos podido vivir juntos". En realidad, afirma que esta obra es una "Exaltación del compañerismo y de la pandilla". Pérez Andújar dice que ha aplicado a la trama el modelo de la novela de caballerías clásica, "tal como lo hizo ya Raymond Chandler". Reconoce que "plagia" el estilo de Chandler, pero también el de Ibáñez en Mortadelo y Filemón (por ejemplo, empezando los capítulos con ripios, versos con rima fácil). El escritor afirma que, en sus obras, siempre ha querido convertir la cultura popular en referente literario, porque este es su mundo. Es por eso que en La noche fenomenal hay gente que se transforma en Walt Disney, en los personajes de Vacaciones en el mar o en Félix Rodríguez de la Fuente. Y, obviamente, en la novela tampoco falta un homenaje a las librerías de Barcelona: Jaimes, Taifa... El mundo que ha fascinado al autor, que se niega a situar sus tramas en un lugar que no sea Barcelona (aunque se lo ha planteado con frecuencia), concluye: "Situar la novela en otra ciudad sería como traicionarme".

A la sombra de un mundo que no existe

Pérez Andujar reconoce que fue un apasionado de los fenómenos paranormales, tan de moda en la época, aunque no los creía. Y uno de los primeros libros que se compró con sus ahorros fue El triángulo de las Bermudas. Todavía siente fascinación por los que creen en los fenómenos paranormales, porque "son heterodoxos", que se cuestionan las verdades aceptadas (aunque digan tonterías). Afirma que está siempre con los perdedores, y que los parapsicólogos, "nunca podrán ganar". Cuando era niño siempre soñaba con tener un grupo de amigos que investigaran misterios, como en las novelas... Ahora, en La noche fenomenal, con sus amigos reales, como el presentador televisivo Emili Manzano, se lanzan a la aventura. Y no sólo retrata a los amigos vivos, sino que quiere hacer un homenaje a los que se han marchado: "Resucito a los amigos que he ido perdiendo", explica, y cita al librero José Batlló, "impregnando por su amor a la literatura", y al escritor de novelas de quiosco Curtis Garland... Una gente que era marginal, "porque lo habían decidido". Y los ubica en lugares que él reconoce, como las Tres Chimeneas de Sant Adrià, que para él es "como el origen del mundo".

Más allá de la ficción

En La noche fenomenal no faltan reflexiones, porque, según Pérez Andújar, "voy pensando mientras voy escribiendo". Y transmite una visión negativa de la modernidad: "la cultura está desapareciendo, o como mínimo está desapareciendo tal como lo hemos conocido en los últimos mil años". Afirma, a pesar de todo que no hay nostalgia, en todo caso hay "melancolía" ("que es más bonita", argumenta). Pérez Andújar, que había hecho crónica política, se siente muy satisfecho de aquella experiencia, porque considera que en el Parlament "se encuentran todas las pasiones" y que esta institución explica "lo que hay en la condición humana", pero afirma que no haría uno libros sobre política, aunque todos sus libros "están impregnados de cultura política".