El fotógrafo René Robert ha muerto a los 84 años en medio de la calle en París. El fotógrafo salió a pasear cuando acabó de cenar el 18 de enero pasado, hacia las 9 de la noche. En un momento dado, cayó al suelo, quedó inconsciente y nadie lo ayudó. Finalmente murió de una hipotermia. El dramatismo del hecho ha conmovido la capital francesa. El periodista Michel Mompontet, que era amigo de la víctima, ha informado a la cadena BFMTV de los hechos. Según ha explicado, Robert quedó extendido en el suelo de una calle céntrica desde poco más de las nueve de la noche hasta las 6:30 de la mañana, momento en que un indigente llamó a emergencias para avisar de que había un hombre echado en la calle.

En el momento que los servicios de emergencias llegaron al lugar de los hechos, Robert estaba muy grave. Además de las heridas a la cabeza provocadas por la caída, sufría una hipotermia severa. Y aunque fue trasladado a urgencias, no pudieron hacer nada para salvarle la vida. "A René Robert, asesinado por la indiferencia. Ha muerto solo en una calle transitada de la capital sin que nadie se haya detenido y lo haya socorrido.. y lo que este trágico y repugnante final de la vida nos enseña de nosotros mismos. ¿Cómo hemos podido olvidar de qué está hecha la base de la humanidad?", ha escrito Mompontet en la red. "A la altura de la calle Turbigo, en el número 89, allí donde el fotógrafo estuvo agonizando durante 9 horas, hay 3 cámaras de videovigilancia. ¿Estaban estropeadas? ¿Por qué no había nadie detrás de las pantallas aquella noche? Y además es un barrio donde a menudo hay disturbios. ¿Nadie ha visto el cuerpo? Dónde estaba la Guardia Urbana", se pregunta.

Robert se hizo muy conocido en Francia por sus fotografías sobre el flamenco, y también trabajó para Paco de Lucía y Camarón. El fotógrafo nació el 4 de marzo de 1936, en Friburgo (Suiza). Descubrió la fotografía con sólo 12 años y acabó muy cautivado por ella hasta el punto de que se inscribió para un curso de tres años con un fotógrafo en Lausana. Después empezó a trabajar para una agencia de noticias local, pero a mediados de los años 60 se trasladó a París buscando nuevas temáticas. En la capital francesa se interesó por el flamenco. Eso hizo que acabara retratando a los protagonistas del flamenco con un particular estilo en blanco y negro que quedará para la posteridad.