Marialluïsa lo dejan. Nos dejan. Hijos pródigos del pop metafísico, los igualadinos anunciaban semanas atrás que su música dejaría de sonar. Se van, sin embargo, publicando un EP, que es toda una delicia, Tinc al cor el que no trobo al cap. Cinco temas de orfebrería pop elaborados con la complicidad de cinco productores diferentes que a buen seguro sonarán esta noche en el concierto que protagonizarán en el festival Sons Solers (cartel donde, cosas del destino, coincidirán con otros favoritos de esta casa que lo dejan, Da Souza). Hablamos con su cantante, guitarrista e impulso creativo, Pau Codina.
¿Qué ha pasado, Pau?
El titular sería que realmente no ha pasado nada, sino que es cosa de energías de cada uno del grupo y que ahora no nos sentíamos con la voluntad hacer otro disco. Un grupo es dedicar muchas horas, ser consantes y, ahora mismo, no estábamos como para dedicar horas, sea por temas laborales o por temas personales de cada uno. Otro titular es que Marialluïsa se separa, pero nuestra amistad es infinita. Seguiremos quedando para cenar, pero ya no teníamos energía para hacer canciones.
Las cosas, aunque sean bonitas, no duran para siempre.
Todo tiene un principio y un final. Nosotros ya hace tiempo que decidimos que lo dejábamos y nos estamos tomando estos últimos meses para acabar con mucho amor.
Ya hace tiempo que decidimos que lo dejábamos y nos estamos tomando estos últimos meses para acabar con mucho amor
Así, ¿ya hace tiempo que lo decidisteis, que lo dejabais?
Sí, bien, quizás hace unos dos meses y medio. Una cosa así.
¿Los temas del nuevo EP nacieron después de que hubierais tomado la decisión?
Nacido no, pero el que hemos grabado con Joan Pons, Senzilla, la vida?, este sí que ya teníamos decidido dejarlo. De hecho, a Joan ya se lo dijimos que lo dejábamos mientras estábamos grabando. Fue como muy bonito y muy nostálgico grabar este tema todos juntos, sabiendo que se acababa.
¿Has mirado atrás estas semanas?
Sí, sí. Y bien, ves todo lo que hemos conseguido y... No nos lo pensábamos, nada, que hubiéramos hecho estos discos que hemos hecho, los conciertos que hemos dado, ir arriba y abajo. De todo lo vivido, nos quedamos con el habernos conocido. Al principio Marialluïsa era un grupo de música, pero de este ha nacido una amistad muy fuerte entre todos nosotros. Nos quedamos con eso, porque será para siempre.
Vuestras canciones también estarán allí para siempre.
Exacto. Sí, sí, que es un recuerdo que nunca se pierde.
Al principio Marialluïsa era un grupo de música, pero de este ha nacido una amistad muy fuerte entre todos nosotros
¿Cuando escribías canciones te preguntabas cómo se interpretaría tu música dentro de unos años, cuando el grupo ya no existiera?
Sí que lo he pensado a veces. Cómo sonará una canción de Marialluïsa de aquí a 20 años: quizás estará fuera de lugar musicalmente, estéticamente, o quizás todavía me gustará... No lo sé.
Os marcháis, pero dejándonos un trabajo delicioso como es Tinc al cor el que no trobo al cap.
Sí, es un EP de 5 temas, con este experimento que queríamos hacer de grabar cada canción con un productor diferente. Teníamos ganas de conocer, probar y compartir métodos de trabajo diferentes... Nosotros lo que nos ha gustado mucho de todos estos años es cerrarnos, grabar y aprender. Por eso dijimos de hacer este EP con gente con miradas diferentes sobre la música.
¿Ha sido un autorregalo de despido, este EP?
Sí, aunque cuando lo empezamos, cuando tuvimos la idea, no habíamos decidido que lo dejábamos. Pero sí, es como un autorregal, y estamos muy contentos de acabarlo con un EP como este que nos encanta, y que es muy variado.
¿Cuáles son los productores con quien habéis trabajado?
Hemos trabajado con Dani Ferrer de Love of Lesbian. También con Joan Pons (El Petit de Cal Eril), con Jordi Casadesús (La Iaia), con Ildefons Alonso (batería de El Petit de Cal Eril) y con Santi Careta.
Hoy tocáis en el Festival Sonidos Solers y os despedís definitivamente el 30 de julio en La Bastida de Igualada. ¿Cómo lleváis la gestión de las emociones?
Excepto el último, en los conciertos que tenemos este mes la idea es hacer como si no fueran conciertos especiales. No queremos alargar los bolos, tocar muchas canciones, y que se hagan pesados. Daremos conciertos como los que hemos hecho hasta ahora, quizás con algún tema más, pero nada fuera de lugar.
¿No hay marcha atrás, verdad?
En principio es un adiós para siempre. Nos seguiremos viendo, cenaremos juntos y haremos cosas juntos, pero musicalmente... No lo sé, nunca se sabe, quizás de aquí a dos meses o dos años o veinte años... No lo sé. Hay proyectos en marcha, cada uno por su parte.
¿Te ves haciendo carrera en solitario?
No, en mi caso hay muchas canciones que nunca he sacado, que quizás algún día sí que sacaré como un disco mío, pero ahora mismo no. Ahora mismo estoy de relax musical y ordenante ideas.
¿Con qué te quedas?
De momentos, hay infinitos, pero me quedo con alguno de los conciertos que hemos dado. Cuando la energía es muy alta y muy sincera. Cuándo te sale un concierto redondo en que todo va bien y dices: "Hòstia, nos lo hemos pasado super-bien, hemos estado relajados...". Me quedaría con estos momentos. Y también con momentos más grupales, de retiradas de fin de semana...
Hay una canción que nos encanta a todos: Nica. No es ninguno de los hits, pero es una canción muy nuestra
Hay un momento... El vídeo documental de És per tu i per mi que hicisteis durante la pandemia... Aquello fue...
Aquello fue la hostia. Aquel fue uno de los momentos. Más que un momento fue una semana y media. Pero sí, siempre lo recordamos como la mejor semana que hemos vivido. A pesar de la pandemia, o quizás por la pandemia, fue un oasis enorme. No teníamos ningún reloj a mano, el tiempo no contaba para nada. Tuvimos todo el tiempo del mundo y las ganas infinitas de hacer cosas. Fue impresionante. Muy mágico.
¿Si dentro de un tiempo alguien quisiera descubrir Maralluïsa, qué canción recomendarías que escuchara?
Hay una canción que nos encanta a todos: Nica. No es ninguno de los hits, pero es una canción muy nuestra. Hay como un cariño muy grande por esta canción. Nos une muy fuerte. Sería uno de los temas que puede resumir Maralluïsa. Nica es casa.