El semanario El Temps se ha quedado sin director cuatro meses después de que el editor de la revista, Eliseu Climent, nombrara a Borja Vilallonga, que dimitió este domingo a las 12:26 vía whatsapp. El dimisionario ha explicado que "nos hemos desentendido [con Climent] en un tiempo récord. Había mucha desconfianza por su parte. Era difícil trabajar". Este miércoles le ha llegado el despido formal.

La causa principal del desacuerdo es que "teníamos modelos de negocio muy diferentes", explica el exdirector. A mí me interesa [un modelo] orientado al mercado, hacer un negocio que pueda vivir con independencia de las subvenciones".

Climent lo explica de otra manera: "Tenemos caracteres muy diferentes y no nos hemos entendido. No hay nada más".

Vilallonga llegó a la dirección sin gran experiencia previa en publicaciones. En enero de este año, "Climent me pidió una reflexión por escrito sobre la revista", explica. El 15 de marzo lo presentaba como nuevo director de la publicación.

"El nuevo nombramiento", decía entonces la misma revista, "forma parte de la voluntad del consejo de administración y su editor Eliseu Climent de emprender cambios profundos en el semanario". Vilallonga añadía que "hace falta una revolución en El Temps". En concreto, quería acercarlo a los milennials, los que tienen entre 18 y 34 años. La idea era "hacer una publicación mucho más joven, más moderna. Queríamos quitarle treinta años".

El Temps fue fundado en Valencia en abril de 1984, con Eliseu Climent como promotor principal. Es la revista de información general decana de los Països Catalans y tiene redacciones en Barcelona, Valencia y Palma.