La grandeur francesa no casa bien con los episodios más oscuros de su historia. El colaboracionismo con los nazis del régimen de Vichy ha sido tabú durante décadas y justo ahora parece empezar en digerirse la memoria de la Guerra de Argelia. Por eso es normal que miles de franceses hayan descubierto ahora la existencia de los campos de concentración donde fueron a parar los republicanos catalanes y españoles derrotados el año 1939.

Los soldados que habían luchado durante tres años contra Franco, en vez de encontrar solidaridad en la patria de los Derechos del Hombre, serían acogidos con menosprecio por la misma Francia que tardaría pocos meses en rendirse vergonzosamente ante Adolf Hitler. Josep, la aclamada película de animación seleccionada en Cannes y ganadora de un Cesar y de un Premio del Cine Europeo, ha obrado el milagro de carear la República Francesa con uno de sus agujeros negros, el trato dispensado a los "indeseables rojos", refugiados que huían de una guerra y se amontonaban en condiciones infrahumanas en las playas de la Catalunya Norte.

Josep, película animación dirigida miedo Aurel. Basada en la vida de Josep Bartolí

Una escena de Josep, película de animación que se puede ver a Filmen

El mismo director de la cinta, el dibujante de prensa Aurélien Froment 'Aurel', entró en contacto con este pasado al descubrir la historia y los dibujos de Josep Bartolí, el dibujante catalán que inspira la película, con guion de Jean-Louis Milesi, y música de Sílvia Pérez Cruz, que pone la voz junto con un viejo conocido del cine francés, Sergi López.

Josep retrata la experiencia (y supervivencia) de Bartolí en los campos franceses hasta la huida en América, donde conocerá a Frida Kahlo con quien mantendrá una relación amorosa y artística, vistos a través de la amistad del protagonista con un gendarme encargado de vigilar el campo que lo ayudará a obtener material para dibujar y, en última instancia, a escaparse de un destino a los campos nazis. Ahora, esta maravillosa pelicula llega a Filmen, donde es uno de los estrenos destacados de esta Semana Santa.

Una vida de película

Dibujante de prensa, fundador del Sindicato de Dibujantes Profesionales de Catalunya y combatiendo al ejército republicano, Josep Bartolí i Guiu (Barcelona, 1910-Nueva York, 1995) marchó hacía el exilio en Francia, donde fue internado en varios campos, como Argeleres, Sant Cebrià, Barcarès o Brams, antes de conseguir huir y embarcarse, con la ayuda de Josep Tarradellas, hacia el Norte de África, donde se embarcó a bordo del Nyassa, el barco portugués que trasladó a América un gran número de exiliados catalanes y españoles. En la retirada había perdido el contacto con su prometida María, embarazada de un hijo que nunca conocería, así como el destino de ambos.

En México, Bartolí entró rápidamente a los círculos de la intelectualidad exiliada, como la pareja formada por Anna Murià y Agustí Bartra o Enric Adroher "Gironella", pero también fue acogido entre los artistas mexicanos, como Diego Rivera y Frida Kahlo. Instalado en Nueva York, donde frecuentaría artistas como Mark Rothko o Jackson Pollock, viviría una intensa relación sentimental con Kahlo, de la cual quedaron como testigo unas cartas apasionadas donde la gran artista mexicana –que como se ve en el filme, ejerció una notable influencia artística en Bartolí– llegaba a afirmar que ojalá pudiera escribirle en catalán.

Josep Bartolí y Frida Kahlo

Josep Bartolí y Frida Kahlo, en una foto de fecha y autor desconocido

Anna Murià, una de sus grandes amistades que permitió su retorno a Catalunya y su reconocimiento entre el público de nuestro país, aseguraba que Bartolí era como el siglo XX, "agitado, inquieto, utópico, inconoclasta, pasional, reivindicativo...". Nacionalizado primer mexicano y, posteriormente, norteamericano, a partir de su primer viaje a Catalunya después de la guerra civil el año 1977 hizo varias estancias y en los años ochenta se le dedicaron exposiciones, mientras su vista se iba deteriorando con la consecuente afectación en su obra. Bartolí va morir en Nueva York el año 1995 y sus cenizas descansan|reponen eternamente en el Mar Mediterráneo, donde fueron lanzadas desde Premià de Mar.

El dibujante que dio testimonio del horror de los campos franceses

De entre la amplia obra de Bartolí, que trabajó para editoriales, revistas e, incluso, para el cine como figurinista y escenógrafo, destacan los dibujos de la serie Guerra y Campos de Concentración, conservados en el Archivo Histórico de la Ciudad de Barcelona y que fueron en buena parte publicados en Campos de concentración, el libro con textos de Narcís Molins i Fàbrega, editado en México en 1944 y reeditado en el 2007.

Josep Bartolí. “Vida en el campo” Tinta i collage sobre cartolina 1939-44 AHCB3-235/5D.19, 24928/Arxiu Històric de la Ciutat de Barcelona

Josep Bartolí. “Vida en el campo” Tinta y collage sobre cartulina 1939-44/AHCB

Estos dibujos tienen una importancia destacada en esta pequeña maravilla que es Josep, donde los dibujos reales de Bartolí se integran en el relato de animación de Aurel, y donde el hambre, la enfermedad y la muerte que forman parte de la tragedia detrás de las alambradas, las humillaciones y vejaciones de los policías encargados de controlar el campo, la xenofobia de una parte de la sociedad francesa, pero también la amistad profunda, la lealtad, el amor y el deseo de libertad.

Josep, pelicula animación basada en la vida de Josep Bartolí

Fotograma de la película de animación Josep.

Josep, que ha sido editado en catalán como álbum ilustrado por Símbolo Editors, no es el único homenaje a este artista catalán que testimonió el horror y amó a Frida Kahlo, entre los que destacan la edición en castellano del libro La Retirada, con dibujos de Bartolí y fotografías de su sobrino Jordi Bartolí –responsable que Aurel coneixés la historia de Josep-, y el documental Bartolí, le dessin pour mémoire.