José María Faraldo, es profesor de la Universidad Complutense de Madrid, pero ha pasado por instituciones académicas de Postdam, Bucarest, Varsovia, Leipzig, París, Berlín, Bogotá y Standford. Su especialidad es la historia de Europa Oriental y, en especial, los regímenes totalitarios de esa zona. Galaxia Gutenmberg le ha publicado recientemente Las redes del terror. Las policías secretas comunistas y su legado, un libro en que analiza la represión policial en Europa del Este. En esta obra también estudia el papel de las policías secretas de estos países en la España de la guerra civil, la dictadura y la transición.

jose faraldo galaxia gutenberg

¿Cómo llega al tema de las policías secretas?

Yo trabajé muchos años en Alemania. Empecé a interesarme por las policías secretas porque me empecé a interesar sobre la memoria histórica del comunismo, y cuando empecé a trabajar los archivos de la policía, necesité saber quiénes las integraban, porqué habían existido, cuáles eran sus características… Y me interesaba especialmente saber cual había sido su relación con España.

La Inquisición tenía rasgos muy modernos, que después repetirían las policías secretas del XIX y XX

Francisco de Goya   auto de fe de la Inquisición   Google Art Project

Francisco de Goya. Auto de fe de la Inquisición. 1808-1812. Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.

En lo que se refiere a las policías secretas, ¿todo empezó con la Inquisición?

No es exactamente así, pero hay algunas líneas de unión. La Inquisición, tal y como la plantearon en los reinos de Castilla y de Aragón era algo muy moderno, una institución de control y vigilancia que tenía rasgos muy modernos, que después repetirían policías secretas del siglo XIX y XX.

¿Tenemos un libro como este sobre la policía secreta franquista?

No, no existe… Ahora estamos intentando en un próximo proyecto, ampliar nuestros conocimientos sobre el tema y localizar los documentos generados por ella. Algunos pueden llegar a aparecer a través del Ministerio de Interior, pero aún no están descatalogados, no son accesibles. Y la mayoría están perdidos. Se ha dicho que fueron destruidos durante la transición. Algunos de los documentos de algunas policías secretas (hubo varias) no se podrán ver, porque tienen relación con gente que está viva y porque están protegidos por las leyes vigentes, pero el resto los deberían poder ver los historiadores… Los archivos se están abriendo mucho en los últimos años, espero que podamos hacer este proyecto.

¿Están más abiertos los archivos de la policía secreta de la dictadura en los países del Este de Europa que en España?

Los archivos estos en algunos países de Europa Oriental están completamente abiertos: todo lo que hay se puede ver. En España no es igual, depende mucho de cada archivo. El Archivo General de la Administración, ahora, funciona muy bien. El Archivo de Exteriores, ahora que está adscrito al Archivo Histórico Nacional, mejora. Pero en España todavía hay muchos documentos clasificados como reservados. En cambio, en los últimos años los archivos militares han mejorado mucho. A veces el problema es la falta de recursos: No hay fondos para reclasificar la documentación considerada secreta. Pero tengo la percepción de que la situación va a mejor…

La cheká, la policía secreta soviética,  la “madre” de las policías secretas que usted estudia, ¿era heredera de la Orjana, su antecesora zarista?

No, no lo era. Pero los que crean la cheká habían sido perseguidos por la Orjana, y por ello conocen lo que es la represión y lo que con ella se puede hacer a los opositores, y a través de este conocimiento como víctimas, hay una cierta transferencia de técnicas… Pero en realidad son muy distintas.

Las policías secretas utilizaban la violencia, incluso la ilegal

Emblema del KGB (2)

Emblema del KGB.

¿Cómo actuaban las policías secretas de estos regímenes totalitarios?

Como cuento en Las redes del terror, era algo muy complejo, que cambiaba según el país y el momento. Eran policías que utilizaban la violencia, incluso la ilegal respecto a las propias leyes de sus países. Intentaban así controlar a la población y evitar que hubiera disidencias. Además de esto, tenían una función "pedagógica". Aa través de la memoria del miedo, del sentimiento del miedo, conseguían que la población se mantuviera dentro de los límites. Esto se hacía incluso desmontando las vidas de las gentes, incluso bloqueando sus estudios en la universidad, o impidiendo bodas. En el libro cuento la historia de una mujer, una disidente. Cuando salía de su domicilio, la policía entraba en su casa y cambiaba de lugar las cosas, un día y otro, hasta que la mujer perdió la cabeza...

¿Qué podían hacer las policías secretas? ¿Eran como nos las pintan en las películas? ¿Tenían licencia para matar?

Depende de los períodos y de los países. En la época estalinista tenían licencia para todo, pero siempre dentro de la lógica del sistema, que de vez en cuando purgaba a sus propios verdugos. Al KGB, a partir de los años 50, le prohibieron asesinar, o torturar (aunque continuarían usando sistemas de presión con los detenidos). Hay bastantes leyendas sobre la policía secreta. Hay casos de gente que se negaba a colaborar con la policía secreta y que no morían. Podían ser marginados, pero no eran asesinados. A veces había la posibilidad de resistirse a la policía secreta.

Parece ser que Beria habría podido tener un papel en la muerte de Stalin

Lavrenti Beria wikipedia

Beria: jefe de la policía secreta de Stalin.

El libro apunta, incluso, que Beria, el todopoderoso jefe del NKVD estalinista, pudo haber tenido cierto papel en la muerte de Stalin…

En el momento álgido del estalinismo, Stalin era un dictador unipersonal, las decisiones las tomaba él y generaba un gran terror. Lavrenti Beria, que controlaba la policía secreta y era próximo a Stalin, generaba un terror inmenso. Pero parece ser que Beria y los suyos tenían miedo a una purga de Stalin. No hay pruebas, pero cabe la posibilidad de que Beria aprovechara su acceso al dictador para acelerar su muerte. A Stalin le cogió un ataque y nadie vino a ayudarle hasta que fue demasiado tarde. Y el que se le dejase morir parece ser que fue organizado por el propio Beria. No obstante, más tarde Beria sería purgado y ejecutado.

¿Qué diferencia había entre las policías secretas de los países comunistas y la de Franco?

No soy especialista en la policía franquista, pero la sensación que me da a mí es que mientras las policías secretas comunistas tenían, junto a su función represiva, una función pedagógica, de hacer que la población abandonara la disidencia, la policía franquista era más un organismo puramente represivo. Los aspectos pedagógicos el franquismo los delegó en la Iglesia y en menor medida en el Movimiento… Por otra parte, las policías secretas de los países comunistas tenían una peculiaridad respecto a las del resto del mundo: tenían una función interior y una exterior. Actuaven tant dins el país com a l'estranger.

La suposición de que la República española estaba penetrada por espías de Moscú es falsa

Alexander Orlov wikipedia

Orlov, el jefe de los agentes secretos en la España en guerra.

¿Jugaron un papel importante las policías secretas comunistas en la guerra civil española?

Creo que este aspecto ha sido muy exagerado. De la misma forma que hemos tenido que oír falsedades como que la república estaba controlada por Moscú o que en España se pretendía crear una república soviética como las de la URSS, esto también es falso. Los documentos no lo avalan. Se han consultado muchos documentos que lo niegan. La suposición de que la República estaba penetrada por espías de Moscú es falsa. Es probable que hubiera más espías soviéticos en Francia que en la República en guerra.

¿Y qué papel tenían las policías secretas comunistas en la España de Franco?

Como cuento en Las redes del terror, en la España franquista hubo tareas de vigilancia e información, sobre todo por parte de la policía soviética. Se dio, ciertamente, una penetración de espías, pero no sabemos hasta que punto fue intensa, porque de España se ocupaba básicamente el gran hermano soviético, y los archivos de la URSS todavía no se han podido consultar en profundidad. Pero, a la vez, los exiliados de países comunistas como Rumanía que vivían en España, eran estrictamente vigilados por sus policías políticas, que a veces buscaba confidentes incluso entre sus familiares. Hay algún caso probado, de momento uno, de asesinatos en España: la policía secreta yugoslava asesinó a un exiliado fascista croata.

Muchos informes no se leían. No había capacidad física de manejar tal volumen de datos

Una de las afirmaciones más sorprendentes del libro es que una parte importante de los informes redactados por agentes y confidentes probablemente jamás se llegaran a leer…

Las policías secretas comunistas recopilaron muchísima información. Nos ha llegado una cantidad impresionante, a pesar de la mucha que se ha perdido, durante y después del comunismo. Los agentes y colaboradores recolectaban tanta información que era incontrolable. Y más en esos tiempos, que no había ordenadores… Recopilaban materiales que a veces no tenían ningún sentido, como las excursiones que hacía una persona determinada… No había capacidad física de manejar tal volumen de datos.

Cuando Putin, un chekista, mantiene un férreo control sobre Rusia, ¿podemos decir que ha terminado la época de estas policías secretas?

Lo que he intentado explicar en este libro es una forma histórica determinada de policía secreta. Las policías secretas existen y existirán, porque responden a las necesidades de los Estados. En un sistema democrático se argumenta que existen para evitar crímenes de gran calado, como el terrorismo. La diferencia es que se supone que en una democracia la policía secreta debe ser controlada y fiscalizada por los mecanismos del Estado de derecho y de la democracia. El problema es que a veces esto no pasa. Estas policías a veces sobrepasan sus funciones, y esto debería ser perseguido…

Con Google, ¿hemos llegado al tiempo de la vigilancia total que propugnaban estas policías secretas?

Lo cuento al final del libro… Ahora la información relativa a cualquiera de nosotros ya está al alcance de cualquiera que la quiera y la sepa buscar, mediante los buscadores de internet. Hice el experimento de buscar información sobre algunas de las personas que cito en el libro, y en Google encuentro más cosas sobre ellas de las que salían en los archivos de la policía secreta. En tiempos del comunismo, la gente intentaba proteger su intimidad de las policías secretas; ahora, en cambio, hemos pasado a un exhibicionismo de la vida privada, que hace que perdamos el control sobre nuestros datos.