Del 2008 en el 2013 se ha incrementado en un 5% el número de los jóvenes de Catalunya que usan el catalán como lengua habitual. Es el dato más esperanzador para el catalán que aparece en el InformeCAT 2018, la 7ª edición de una recopilación de datos de la Plataforma per la Llengua que intenta constituir una radiografía de la situación de la lengua catalana mediante 50 datos relevantes, obtenidos de estudios propios o exteriores. El otro dato muy positivo es que el 56% de los hijos de los llegados a Catalunya habla en catalán a sus hijo . De esta forma buena parte de la tercera generación de inmigrantes usaría el catalán con facilidad (lo que marcaría su utilidad como herramienta de cohesión social). En este momento se estima que hay aproximadamente 13.400.000 personas que entienden el catalán y 10.050.000 que lo hablan. La situación, a pesar de todo, es muy diferente según las regiones del dominio lingüístico. En Catalunya Nord la situación es especialmente preocupante: sólo 7 de cada 1000 familias transmiten el catalán (aunque antes todavía era peor, y se situaba en el 3%).

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Òscar Escuder y Neus Mestres. Foto: Twitter Plataforma per la Llengua. @llenguacat.

"Queda mucho trabajo por hacer"

La cifra más negativa del InformeCAT 2018 es que el catalán ha perdido 300.000 hablantes habituales en Catalunya en los últimos 15 años. Òscar Escuder, presidente de la Plataforma per la Llengua, afirma que si no se mejora la situación del catalán y se normaliza realmente, se corre el peligro "de la sustitución lingüística". "Queda mucho trabajo por hacer", ha afirmado. Y ha apuntado que la inmersión lingüística (que quizás no se practica correctamente) garantiza el aprendizaje del catalán, pero no su uso. "No es suficiente con enseñar el catalán en las escuelas", asegura Neus Mestres, directora de Plataforma. Escuder ha aclarado que si bien en algunos aspectos hay avances, esta no es la situación ideal: "No hay ninguna lengua equiparable al catalán que tenga un 30% de la población que vive en el territorio que no conozca la lengua del sitio donde vive", ha "explicado".

Mejoras en el País Valencià

Plataforma per la Llengua ha valorado positivamente las nuevas políticas que ha impulsado el nuevo gobierno valenciano. En el ámbito de la comunicación, valora muy positivamente que se recuperen los medios de comunicación públicos en catalán. Y en el ámbito de la enseñanza considera una buena notica el hecho que el nuevo gobierno valenciano garantiza que los niños puedan ser educados en catalán si lo piden sus padres (un hecho que el antiguo gobierno del PP no garantizaba). Sin embargo, la situación es muy complicada, porque sólo un 46% del personal de la Generalitat Valenciana sabe escribir en catalán, lo que limita su uso en el ámbito oficial.

Cultura bien, empresa mal

Plataforma per la Llengua valora positivamente la evolución del catalán en el mundo de la cultura, y el hecho de que en 2016 se produjeran 1.050 discos y se editaran más de 11.000 libros se considera un dato muy bueno, como el hecho de que siete de cada debe oyentes escuchen la radio en catalán. En el ámbito cultural lo que Òscar Escuder valora peor es el cine. La ONG del catalán apunta, además, que hay una clara discriminación del catalán en el mundo empresarial. Eso se hace patente, por ejemplo, en la industria automovilística, que ignora el catalán en manuales, catálogos, navegadores... En cambio, se notan mejoras en la situación del catalán a los móviles y a las nuevas tecnologías. Escuder denuncia que el código de consumo no se está cumpliendo en todo aquello que hace referencia al catalán.

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Una administración a la contra

Òscar Escuder denuncia que el catalán vive una situación anómala, al no ser reconocido en Europa, como lo son lenguas con menos hablantes. Afirma que eso depende completamente de los Estados y que en el caso catalán, los Estados juegan claramente a la contra, con muy poca sensibilidad para la diversidad lingüística (por ejemplo, dictando normativas que discriminan al catalán). En el Informecat 2018 se registra que sólo el 2% de las plazas convocadas por el Estado reconocen el catalán como mérito (y tan sólo 2 como requisito). Pero, además, se destaca que el gasto del Estado para enseñar catalán a los funcionarios que no lo entienden es irrisorio. Algunos de los trámites más importantes que se tienen que hacer con la administración central no se pueden hacer en catalán (como el pago del IVA, pedir la tarjeta sanitaria europea, o solicitar cita previa para el DNI). Escuder denuncia que la peor situación a nivel de la administración se encuentra en la justicia, un campo dominado completamente por el Estado; en Mallorca se tarda dos años al traducir los documentos que se presentan en catalán y se llegó a denunciar una jueza por redactar una sentencia en catalán.. Pero también la Plataforma ha detectado este año un aumento de las denuncias por la discriminación del catalán en el ámbito público, especialmente en Hacienda y en Sanidad (a pesar de que este es un ámbito que depende de la Generalitat).

Necesario compromiso ciudadano

La situación del catalán depende de la política de la administración, pero también de los propios hablantes, según la Plataforma. Neus Mestres ha apuntado que no es suficiente con un cambio de políticas de la administración, sino que también hace falta un cambio de actitud de la ciudadanía. El informe, por ejemplo, muestra una tendencia muy fuerte de los catalanes a cambiar de lengua cuando interactúan con un hablante que les habla con español (lo hace el 70% de la gente), lo que dificulta la normalización.