Edicions 62 ha presentado hoy a la prensa la Història Mundial de Catalunya, coordinada por Borja de Riquer. Se trata de un intento de traspasar al ámbito catalán una iniciativa que ha tenido un gran éxito de público: la reciente historia mundial de Francia, de Patrick Boucheron (que ya ha tenido también su réplica italiana). La idea, según Josep Ramoneda, editor de la obra, es centrar la atención "en aquellos momentos en que Catalunya se proyecta en el mundo y en aquellos en que el mundo influye en el devenir de Catalunya". Ramoneda ha aclarado que cualquier historia tendría que ser historia mundial, pero que demasiado a menudo eso no es así. El lunes 26 se hará una presentación pública de la obra en el CCCB.

De la escala micro a la macro

La obra está integrada por 124 capítulos, de unas 5-7 páginas, de 98 autores. Cada uno de ellos refleja un episodio clave de la historia de Catalunya, algunos de ellos muy puntuales. Borja de Riquer destaca que las historias se pueden leer de forma independiente, lo cual facilita que alguien que no sea lector habitual se deje guiar por la curiosidad y aumente sus conocimientos sobre la historia de Catalunya. Y eso con un libro que se ha realizado por los mejores especialistas en cada materia, algunos de los cuales hacen aportaciones novedosas surgidas de sus últimas investigaciones. Riquer ha afirmado, en conclusión, que quiere ser al mismo tiempo un texto atractivo y solvente. El medievalista Josep M. Salrach ha insistido en este aspecto: "Hay investigadores muy brillantes que en 5 páginas son capaces de resumir lo esencial y más relevante de una tesis doctoral".

De la prehistoria al Esculapio de Empúries

Casi la mitad del libro está consagrado a la Edad Contemporánea, pero pretende cubrir todos los periodos históricos, desde la prehistoria hasta la actualidad. Miquel Molist, coordinador del área de prehistoria, ha afirmado que en pocas páginas se da una visión incisiva de miles de años. Y ha resaltado uno de los capítulos, dedicado a una pintura rupestre con estilo levantino que se encuentra en Capçanes que representa una matanza prehistórica, de Josep Castells, junto con un artículo suyo sobre las minas de variscita (una piedra semipreciosa de color verde) excavadas en Gavà por los primeros agricultores. Isabel Rodà, responsable del ámbito de antigüedad, ha destacado el texto dedicado a la estatua de Esculapio en Empúries (contemporáneo de la Venus de Milo, "y con brazos", ha resaltado), así como un artículo sobre las murallas de Barcino, "las murallas del miedo".

Condesas, divorciadas y huelguistas

Este volumen ha querido dedicar cierta atención a la historia de las mujeres, uno de los campos en que hay mayor producción historiográfica en los últimos años, como el dedicado a las condesas que gobernaron Catalunya. Hay artículos que analizan los intentos de divorcio de las mujeres a la Edad moderna; las protestas de las hiladoras en 1628; o la huelga de Manresa de 1946, en pleno franquismo, en que las mujeres llegaron a negociar con las autoridades franquistas. Josep Maria Salrach, el revisor del área de medieval, ha querido poner de relieve también otros capítulos, como el dedicado al papel de Catalunya en la construcción europea (y su participación en batallas como las de Murat o Las Navas de Tolosa), el relativo a Bernat Metge y a Lo Somni, o el que analiza la entrada triunfal de Alfonso el Magnánimo en la ciudad de Nápoles. Este periodo se cierra con un capítulo sobre la llegada de Colón a Barcelona... Joaquim Albareda, coordinador de los textos de Historia Moderna, ha querido destacar dos artículos realizados por grandes historiadores que se han muerto recientemente: uno de Eva Serra, sobre la proclamación de la República catalana en tiempo de Luis XIII, y otro de Josep Fontana sobre la figura de Antoni de Capmany, un pensador que Albareda considera como el inventor de la historia económica, pero que ha sido ignorado por la historiografía española.

El 0-5 del Barça en el Bernabéu

Por lo que respecta a las casi 450 páginas dedicadas al mundo contemporáneo, coordinadas directamente por Borja de Riquer, incorpora textos muy diversos: desde uno en que se compara el Plano Cerdà con otros planes de Ensanche europeo, hasta un artículo de Sergi Pàmies sobre la victoria del Barça en el Camp Nou por 0-5 en 1974. El volumen acaba con dos artículos referentes al 2017: el dedicado al concierto de despedida de Raimon, y el de la "peculiar declaración de independencia".

Sin el trasfondo de la historia francesa

El libro en que se inspira este volumen, la Historia Mundial de Francia de Patrick Boucheron, resultó terriblemente polémica en el Hexágono, porque pretendía ofrecer un relato alternativo al tradicional, alejado del nacionalismo de una historia cerrada y abierto a una sociedad más inclusiva. Por eso ofendió a los que consideraban que hacía falta hacer difusión del patriotismo francés en la escuela (y al mismo tiempo controlar a los maestros para evitar "el adoctrinamiento" sobre el mestizaje y el internacionalismo). Se acusó a Boucheron de hacer una "historia políticamente correcta", a la vez que otros críticos de su obra reivindicaban que era necesario volver a una historia de los hechos más esenciales y no ir hacia el aprendizaje de anécdotas dispersas. La edición catalana no pretende ser una revisión genérica de la historiografía, ni catalana, ni española, y a pesar de todo, Josep Ramoneda ha querido destacar que este texto es todo lo contrario de una historia cerrada del país, y que quiere estar exenta de "todo tipo de ufanías nacionalistas" (aunque algunos capítulos no se centran en las influencias exteriores en Catalunya, sino que se centran en hechos locales en que Catalunya fue pionera, sin explicar cómo eso cambia el mundo, como el consagrado a Cerdà, o el dedicado al Bulli). Con respecto a la acumulación de historias sobre hechos históricos que han pasado desapercibidos, Salrach argumenta que esto es muy positivo, porque "cuando trabajas sobre lo concreto, te acercas a lo universal". Sin cuestionar este hecho, no acaba de quedar claro que todos los artículos se encaminen hacia dar una visión mundial de la historia de Catalunya, como pronostica el título.