El Memorial Democràtic presenta una miniexposición a su sede dedicada a la actitud del régimen franquista durante la Segunda Guerra Mundial: Franco neutral? Con esta muestra se quiere recordar la colaboración de Franco con HitlerMussolini. Una exposición muy reducida, comisariada por Joan Maria Thomàs, que tratar de aclarar un aspecto confuso de nuestra historia.

Por poco

España no luchó como Estado en la Segunda Guerra Mundial. Y, a pesar de todo, a nadie se le puede escapar la simpatía de Franco hacia Hitler y Mussolini, los dos líderes que le habían ofrecido una ayuda básica durante la guerra civil. La exposición quiere dejar bien claro que Franco no fue nada neutral, sino que colaboró con Hitler. En realidad, se muestra como al principio de la guerra el régimen se planteó muy seriamente entrar en guerra.

La colaboración

La exposición analiza diferentes puntos en que el franquismo colaboró efectivamente con los nazis y los fascistas. En primer lugar presenta el buen entendimiento entre estos regímenes, con visitas mutuas continuas y con la copia, en España, de las prácticas fascistas y nazis (de hecho, la prensa del periodo, muy filoalemana, es bien reveladora). Pero también apunta la colaboración militar, con el suministro de bienes esenciales para el ejército alemán y con el uso de puertos y aeropuertos españoles como escala técnica por los nazis. Se nos acuerda, además, de que la Alemania nazi lo agradeció con la repatriación forzosa de republicanos españoles (como el president Companys) y con la deportación de muchos otros en los campos nazis (sin que el régimen hiciera nada para defenderlos).

 

Heinrich Himmler, jefe de las SS alemanas, acompañado de Luis Orgaz, capitán general de Catalunya, y otras autoridades franquistas visitan el monasterio de Montserrat. 23 de octubre de 1940. Pérez de Rozas / Arxiu Fotogràfic de Barcelona.

Españoles en los dos bandos

La exposición recuerda que muchos españoles, por gusto o a la fuerza, participaron en la Segunda Guerra Mundial como aliados de los nazis, y lucharon en la División Azul. Pero destaca que también hubo muchos que se añadieron a los ejércitos de Francia y de Inglaterra y que se enfrentaron al nazismo. Y también tiene un recuerdo para aquellos diplomáticos del franquismo que, a pesar de todo, protegieron a los judíos, incluso en contra de las instrucciones de su gobierno.

El factor colonial

La exposición repasa los puntos en que Franco colaboró con Hitler, pero no deja muy claro el porqué de todo. En realidad, es cierto que todas las simpatías de Franco y de buena parte de la cúpula del régimen, en aquella época, estaban con los nazis. Pero también es cierto que había otro factor que motivaba al régimen: las ansias imperiales. Franco quería tener un imperio como los que tenían Francia, Inglaterra, Portugal y Bélgica (creía que las grandes potencias habían robado el imperio que le correspondía a España). E intentó reclamar a Hitler, en su encuentro en Hendaya, todo Marruecos, buena parte de Argelia y de Mauritania, media Nigeria, Camerún y Gabón. E incluso pensaba en reclamar derechos de España sobre Andorra, el País Vasco francés, el Rosselló y l'Alguer... Pero Hitler no cedió: consideraba prioritarios sus tratos con la Francia de Vichy, que exigía la integridad del imperio colonial francés. Finalmente, no hubo acuerdo.

Rehacer una virginidad

Al acabar la Segunda Guerra Mundial, el régimen franquista intentó borrar cualquier rastro de su pasada germanofilia. Se trataba, como afirmó burlescamente el diplomático Agustín de Foxà, de "rehacer una virginidad". Durante años y años los medios de propaganda del régimen elogiaron la "sabiduría" de Franco, que había "engañado" a Hitler y que "nunca" había querido entrar en guerra. Pero los franceses, los ingleses y los norteamericanos se acordaban bien, de la complicidad de los franquistas con Hitler, pero prefirieron olvidarlo: Franco se convirtió en un aliado en la lucha contra el comunismo durante la guerra fría. Aunque los aliados se habían comprometido a acabar hasta los últimos vestigios del fascismo en Europa, Franco murió de viejo y en la cama.

El porqué de una exposición

El historiador Joan Maria Thomàs, comisario de la exposición, argumenta que esta muestra era necesaria, porque las campañas de propaganda del franquismo, a partir de 1945, tuvieron un cierto éxito: cierta gente todavía cree que Franco resistió las presiones de Hitler y que rechazó por convicción la entrada en la guerra. Thomàs está convencido que la colaboración de Franco con el Eje fue muy importante, en primer lugar con el suministro de bienes básicos de utilidad militar, como el wolframio (que se usaba para elaborar las granadas antitanque), pero también en el ámbito de la inteligencia militar. Es un tema que los historiadores españoles conocen hace tiempo, pero Thomàs lamenta que a veces no han hecho una labor óptima de divulgación de sus investigaciones. Espera que esta exposición sirva para dar a conocer, a nivel local e internacional, la colaboración de Franco con Hitler y Mussolini.