La danza de la muerte de Verges, por primera vez en su historia, incorpora a dos niñas para hacer de esqueletos, según adelanta Catalunya Ràdio. Las dos niñas son el Mar y la Nuera, de 13 años, que decidieron presentarse cuando supieron que buscaban nuevos bailadores. "Faltaban dos personas y nos hacía ilusión hacerlo. Preguntamos si lo podíamos hacer para probarlo, a ver cómo era la experiencia. De momento nos está gustando mucho y queremos aprender", dicen las niñas a Catalunya Ràdio.

La Processó de Verges es una representación teatral que se escenifica únicamente la noche del Jueves Santo, conserva las características más tradicionales de este tipo de representaciones de Semana Santa. Desde los inicios, la misa se hacía en latín y, por lo tanto, era muy difícil para la gente del pueblo poder seguir los mandamientos eclesiásticos, de manera que el teatro era un buen recurso para poder enseñar la doctrina en lengua vulgar, el catalán, y con una técnica teatral más libre, más popular, más próxima al fiel.

Los actos de la procesión se inician a las 5 de la tarde con un desfile de las Manages (romanos), que hacen un recorrido por las calles del pueblo, saliendo y acabando en el ayuntamiento.

En el transcurso de la procesión destaca una verdadera joya única de la cultura popular: la danza de la muerte. En esta danza, cinco esqueletos saltan al sonido de un tambor, colocados en forma de cruz y con un séquito de cuatro personajes más, los cuales, con antorchas, iluminan el cuadro y aportan el aire tétrico que da sentido. El cuerpo principal de la danza de la muerte es formado por dos adultos y tres niños, que por primera vez, dos de estas serán niños.