El Museu d’Art de Girona se propone recuperar el mundo desconocido de las mujeres artistas de principios del siglo XX con la exposiciónFeresa del silenci. Las artistas en la revista Feminal, 1907 - 1917. Todas las artistas presentes en la muestra son contemporáneas a la revista y se las dedicó, como mínimo, un artículo de presentación.
Rompiendo un silencio indignante
Feminal fue la primera revista de Catalunya dirigida y escrita por mujeres. Era un suplemento mensual de la revista La Il·lustració Catalana. Se editaron 128 números durante diez años y en este periodo se mencionaron hasta setenta y cuatro mujeres artistas. Se pueden contar con una mano las mujeres artistas de quienes se ha realizado un estudio en profundidad. Probablemente, algunas de las más conocidas son Lluïsa Vidal (1876 - 1918), Pepita Teixidor (1865 - 1914), Lola Anglada (1892 - 1984) y Laura Albéniz (1890 - 1944). El resto ha quedado bastante olvidado por la historia del arte, como es el caso de, por ejemplo, Teresa Lostau (1884 - 1923) o de Pilar Montaner (1876 - 1961).
Se pueden contar con una mano las mujeres artistas de quienes se ha realizado un estudio en profundidad
Además, muchas de ellas pudieron desarrollar poca obra, ya que al casarse tenían que abandonar la dedicación. Así pues, construir una exposición con estas artistas como protagonistas es romper un silencio indignante.

Un antes y un después en el feminismo catalán
La exposición se caracteriza por el color rosa. Este color todavía se asocia a la mujer y eso nos puede sugerir dos lecturas opuestas. La positiva es que va acuerdo con la feminidad de la época; cuadros de jardines idílicos pintados con colores pastel. La negativa, paradójicamente, es que se asocia el rosa a la mujer por la feminidad que le tiene que corresponder. Además, el color rosa se combina con un papel de pared típico de la época, como símbolo interior de hogar, mundo donde quedaba relegada la mujer.
No tenían independencia ni social ni económica, por lo tanto, sabían que vivir del arte les costaría mucho más sudor que a cualquier hombre
La mayoría de los cuadros expuestos representan flores y animalillos porque en aquella época se consideraba que era un tema adecuado para las mujeres. No tenían independencia ni social ni económica, por lo tanto, sabían que vivir del arte les costaría mucho más sudor que a cualquier hombre, solo por su condición de género. Era complicado que el arte pudiera ser algo más que un pasatiempo para ellas. La revista Feminal fue un antes y un después en la historia del feminismo catalán. La directora de la revista, Carme Karr (1865 - 1943), reclamaba que la mujer fuera algo más que una "máquina maternal". Este espíritu revolucionario se echa de menos en la exposición. Después de romper el silencio, se tendría que hacer un ruido bien fuerte. Lisa y llanamente, cómo dice Lluïsa Denís i Reverter (1862 - 1946) en su obra Plat (1915): “No estic per flors i violes”. La exposición, comisariada por Elina Norandi, se puede visitar hasta el 26 de febrero.