Las tres nominaciones españolas al Oscar han quedado en nada. Muchos ya habían augurado que Penélope Cruz volvería a gritar "¡Pedro!" cuando abriera el sobre del ganador a la mejor película extranjera, pero no fue así. Dolor y gloria, de Pedro Almodóvar, ha sido desbancada por los Parásitos de Bong Joon-ho. A pesar de todo, el hecho de que el filme coreano se llevara el Oscar a mejor película ha hecho una pizca más dulce la derrota.

Antonio Banderas estaba nominado a mejor actor por su interpretación en Dolor y se gloria, la cinta de cariz autobiográfico de Almodóvar. Pero no era el favorito, y finalmente, no hubo sorpresas. Joaquin Phoenix se llevó la estatuilla por su interpretación en Joker.

Quizás lo que ha dolido más es que Klaus, de Sergio Pablos, no consiguiera llevarse la estatuilla a la mejor película de animación. Klaus había ganado los premios Bafta en la categoría de animación, y va arrasó en los Annie, los premios del cine de animación. Ahora bien, al fin el Oscar fue para Toy Story 4, una película de Walt Disney y Pixar. La gran industria, una vez más, se impuso.