En medio del más terrible de los escenarios, las niñas y los niños palestinos del campo de refugiados de Rafah han podido evadirse durante unas pocas horas de la cruenta realidad que les persigue día a día desde el pasado mes de octubre de 2023 a consecuencia de la ofensiva del ejército israelí gracias al cine.

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Los niños se reúnen en un cine improvisado instalado entre las tiendas del campo de refugiados de Rafah / Foto: Haitham Imad / EFE

Cine para niños en el campo de refugiados de Rafah

Ha sido este fin de semana entre las tiendas del campo de refugiados de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, gracias a la iniciativa del desplazado interno palestino Muhammad Al-Khudari. No ha sido más que una sencilla sábana colgada sobre una de las vallas del campo reproduciendo las imágenes, una selección de dibujos animados, enviadas por un proyector. Suficiente como para hacer olvidar a los centenares de niñas y niñas que, dibujando una sonrisa a la cara, se reunían delante de la pantalla de la crueldad de su presente.

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Los niños del campo de refugiados de Rafah se evaden durante unas horas de su realidad gracias al cine / Foto: Haitham Imad / EFE

Desde el 7 de octubre de 2023, hasta 1,7 millones de personas, o más del 75% de la población, han sido desplazadas a toda la Franja de Gaza, algunas más de una vez, en busca de seguridad, según la Agencia de Obras y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina al Oriente Próximo (UNRWA). La organización ha añadido que el enclave palestino sobrevive en la máxima pobreza, con 1,1 millones de personas (la mitad de su población) "que viven una inseguridad alimentaria catastrófica" a causa del conflicto y las restricciones en el acceso humanitario.