Unas semanas después de que Isona Passola, presidenta de la Academia del Cine Catalán, advirtiera al Parlament que el cine catalán estaba en una situación crítica, la Academia ha presentado su valoración sobre la situación de esta industria. La Academia ha aprovechado la ocasión para presentar la renovación de su junta. Isona Passola ha asegurado que la nueva junta está destinada a cubrir una nueva etapa "muy política", en la que se tendrá que negociar mucho para salvar la situación del cine catalán. Pero, sobre todo, Passola ha asegurado que hay que captar nuevos espectadores para el cine catalán, sea en las salas de exhibición o pof otras vías, como mediante las plataformas digitales. Por eso la Academia ha impulsado el Ciclo Gaudí, con el fin de llevar el cine catalán por todo el territorio, haciéndose presente en las pequeñas localidades. En esta edición ha alcanzado los 12.000 espectadores, y se espera que en la próxima edición todavía crezca. Además ha servido para volver a poner en marcha salas de proyección que habían cerrado en algunas poblaciones que ya no tienen cine.

Desventajas fiscales

Isona Passola ha criticado que en España el cine "sea tratado fiscalmente como un bien de lujo", y asegura que eso provoca graves problemas para garantizar la continuidad del cine catalán. Ha comparado el IVA imperante, del 21%, al de otros países, donde incluso se sitúa por debajo del 5%. Además, ha reclamado que no hay ayudas al rodaje. Pero, sobre todo, ha criticado que la televisión no actúe como motor de la producción cinematográfica catalana. Ha asegura que el hecho de que TV3 no apueste por el cine catalán hace que la ficción cinematográfica quede hipotecada. Passola ha destacado que sin cadenas que precompren los derechos de antena es muy difícil hacer películas de calidad. Las películas que se hacen, con presupuestos muy escasos, compiten con desventaja con las producciones europeas que están mucho mejor dotadas económicamente. Passola, ha recordado que en toda Europa el cine es un asunto de Estado, en el que las instituciones apoyan las producciones locales como una forma de dar a conocer su país y crear cultura local.

Problemas de distribución

De las 68 producciones catalanas estrenadas durante el 2016, 27 son documentales y tan sólo 38 obras de ficción, a pesar de las dificultades que tienen las obras de no ficción para distribuirse y obtener beneficios. De hecho, a pesar de que la recaudación global del cine catalán (un poco más de 63 millones de euros, ofrecidos por 10.700.000 espectadores), se valora muy positivamente, en realidad más de la mitad corresponden sólo a dos obras: Un monstruo viene a verme, con 26 millones, y Palmeras en la nieve, con 13. Eso denota que hay muchas películas que no consiguen rentabilizarse. A pesar de todo, la Academia se muestra satisfecha por los premios recibidos por el cine catalana por todas partes, que demuestran el reconocimiento de la crítica a las producciones catalanas, y ha destacado sobre todo los premios al cortometraje Timecode y a la película La muerte de Luis XIV, de Albert Serra. Los datos del cine catalán de enero a mayo de 2017 no muestran una tendencia positiva y ponen de manifiesto un descenso de público: tan sólo se han recaudado 9 millones de euros, con poco más de 1,4 millones de espectadores.

El catalán sigue teniendo problemas

Sólo 20 de las 65 películas catalanas del 2016 se grabaron en catalán (un 31%). En realidad,  únicamente el 0,7% de las películas que se ven en Catalunya son producciones grabadas originariamente en catalán. En los rodajes sigue siendo mayoritario el uso de la lengua castellana (un 45%), y el inglés se va consolidando (un 15% de las producciones). Pero entre las películas premiadas el porcentaje de producciones en catalán es todavía menor: las películas que tienen más impacto se graban, de forma muy mayoritaria, en castellano. Isona Passola critica que la Generalitat no tenga una política decidida de apoyo a las producciones realizadas en catalán y considera que grabar cine en catalán, hoy, es una misión imposible.

Nueva junta

La junta de la Academia seguirá estando dirigida por Isona Passola, y mantiene algunos de los antiguos miembros, pero se ha renovado mucho. Queda integrada por el productor Paco Poch, el especialista en cortometrajes Agustí Argelich, la actriz televisiva Sílvia Quer, el guionista Eduard Solà, la directora Judith Collell, el director de fotografía Josep Maria Civil, la actriz Maria Molins, el productor televisivo Joan Bas, el productor Edmon Roch y el director Sergi Doladé. Passola ha apuntado que las nuevas incorporaciones tratarán de afrontar los nuevos desafíos del cine catalán.

Noche del Cine el 28 de junio

La Noche del Cine, una de las grandes fiestas del cine catalán, se celebrará en el Poble Espanyol, el 28 de junio. Ya han confirmado su asistencia algunos de los directores, actores, guionistes y productores catalanes emblemáticos. En esta noche se concederá el premio Pepón Coromina, en su 5ª edición, a la joven Nely Reguera, directora de María (y los demás), por haber hecho una obra original, con una mirada propia (la película ganó un premio en el Festival Iberoamericano de Miami) y fue nominada a un Oscar.