Hoy se presenta el libro que ganó el último premio Nadal de novela: Media vida, de Care Santos, publicada por la editorial Destino. La traducción al catalán, Mitja vida, que ha publicado Columna, ha sido realizada por la misma Care Santos. El editor Emili Rosales lo ha definido como "un libro de madurez (...) un tour de force con los personajes y con una época". Hoy, a las 19h, el libro se presentará en la Casa del Llibre. Care Santos estará acompañada de cuatro mujeres, ya que la escena central de la novela es una cena entre cinco mujeres.

Del franquismo a la actualidad

Media vida, según la autora, "es el retrato de una generación de mujeres que empezaron tarde a vislumbrar su libertad". Se trata de las mujeres nacidas en 1936, que tuvieron una infancia y juventud marcadas por un sistema autoritario y retrógrado y que empezaron a beneficiarse de la libertad cuando ya eran adultas. Las cinco protagonistas de la obra han coincidido en un internado por causas dramáticas que las han afectado en todas; y repasarán todas sus vidas durante una cena que harán en los años ochenta. Esta novela es, pues, el análisis de los cambios sociológicos que vivieron todas las mujeres de su edad. "Es una generación que merecía un homenaje", afirma Care Santos, porque "recorrió un gran camino, en que pasaron por dramas muy fuertes". Las cinco mujeres que protagonizan la novela representan cinco respuestas diferentes a los retos que las mujeres de su edad encontraron durante su existencia.

El tiempo que pasa

La cena que ocupa un lugar central en la novela tiene lugar en 1981, la misma semana que se aprueba la ley del divorcio, y el mismo día que se casan Lady Di y el príncipe Carlos de Inglaterra. Care Santos dice que escogió este momento porque se trata de un punto estratégico de la transición, donde se aprobaron leyes que fueron decisivas para el futuro de la gente. En la novela dos mujeres que están a la cena se ven directamente afectadas por la ley del divorcio: una es una diputada que ha colaborado a redactarla, y la otra es una mujer de la que su marido se quiere divorciar y que considera intolerable la ley. Santos cree, a pesar de todo, que es un tiempo pasado, y argumenta que de la generación de su madre en la nuestra, "hemos ganado mucho". Pero además, asegura que no sólo las mujeres han mejorado de situación, sino que los hombres, en estas dos generaciones, también han cambiado mucho, "afortunadamente".

Juicio al franquismo

Hasta ahora Care Santos había escrito sobre el siglo XIX, y ahora ha roto con su tema habitual. Ahora bien, reconoce que hacer una novela sobre un tiempo que mucha gente que ha vivido le ha resultado difícil, mucho más de lo que esperaba, porque hay que documentarse muy estrictamente. Para eso le ha hecho falta un trabajo profundo de hemeroteca, pero también ha realizado una tarea de recogida de memorias orales. Care Santos asegura que ha tenido la suerte de chocar con "mujeres que no callan" y reconoce que en Medía vida hay mucho de la memoria de su madre, de su abuela, y de otras mujeres de su época. Con esta novela, Care Santos asegura que "ha pasado cuentas" con una época que hundió la vida de muchas mujeres: "La República había preparado un futuro mejor y el franquismo supuso una marcha atrás, un retorno al siglo XIX". Dice que, a pesar de todo, lo más sorprendente es encontrar a gente a la que la época ya le pareció bien, o gente que se dio cuenta de que la habían engañado muy tarde.

Madurar

Media vida es una novela sobre el paso del tiempo, sobre el lastre del pasado. Las protagonistas tienen unos 45 años, y ya han vivido muchas cosas. Tienen vida por delante, pero también un pasado que las condiciona, que las ha marcado profundamente. "La vida nos pone retos", asegura Santos, que dice que cuando llegas a cierta edad "te tienes que librar de cosas para poder continuar". Uno de los problemas que aparece en varios momentos de la novela es el perdón, un tema que según la Care Santos, "la preocupa mucho, sobre todo desde que es madre". Dice que le inquieta la banalización del perdón, pero también la exigencia de pedir perdón a alguna gente mucho después de los hechos. En la obra, las protagonistas, que han sufrido muchos traumas, se enfrentan a diferentes tipos de perdón.

Condenadas a la infelicidad

En realidad, ninguna de las cinco mujeres que protagonizan la novela es realmente feliz en sus relaciones, como tantas y tantas mujeres de su época. Para Caro Santos "estos personajes son fruto de su tiempo" y afirma que "es probable que muchas mujeres de su edad se sientan identificadas". La autora asegura que su madre, uno de sus primeros lectores, se sintió muy próxima a algunas de las protagonistas, y que reconoció a algunas de sus amistades y conocidas en las otras. Santos explica que en alguna de sus presentaciones ha encontrado a mujeres que le aseguran que el relato es muy próximo a sus vivencias. A pesar de todo, a la ganadora del Nadal no le gusta que la definan como una autora "para mujeres", ya que dice que "todos los libros son para hombres y para mujeres" pero reconoce que "esta es una novela más para mujeres que las anteriores".

 

Foto de portada: Care Santos con el editor Emili Rosales.