Tras muchos avatares, el Ibex ha recuperado los 10.500 puntos, cuota que ha llegado a perder en el transcurso de la sesión. El Eurostoxx también se ha ido arriba gracias a la elevada capacidad del sector exterior alemán.

El sondeo del sentimiento europeo medido por el índice Sentix ha indicado que los inversores temen que Draghi pueda provocar un vapuleo en los bonos europeos, pero al mismo tiempo se han mostrado confiados sobre la evolución de la inversión la zona. El BCE ha tranquilizado al mercado señalando que compró 14.000 millones de deuda europea la semana pasada. 

El petróleo Brent ha retrocedido un 0,45%, hasta 46,51 dólares después de que inversores se quejaran de que el algoritmo que regula su evolución y precio altera las condiciones del mercado.

En el Ibex, Almirall ha sufrido un fuerte castigo al rebajar sus previsiones de crecimiento e ingresos por el impacto negativo de los problemas en EEUU de la empresa Aqua, que adquirió en 2013.

En Wall Street, donde el Dow Jones retrocedía a media sesión levemente, un 0,06%, la confianza sobre los resultados empresariales está disminuyendo, según JP Morgan. El mercado está ahora mismo en zona de nadie.