Camilo Sesto murió en septiembre de 2019, ya hace más de seis años, pero todavía hoy es noticia. El cantante fue enterrado en su ciudad, Alcoi, de la que era un gran defensor, y precisamente su tumba es ahora objeto de polémica. El PP ha denunciado el rodaje de una película pornográfica en el cementerio del municipio, acusando al alcalde socialista de haber permitido la grabación en un espacio que debería ser tratado con el máximo respeto institucional, moral y cultural". Desde el PSPV y Compromís lo niegan en rotundo y aseguran que ellos no han dado permiso para filmar una película para adultos en este recinto y, menos aún, en la tumba del cantante.
El PP ha insistido en que este hecho es una muestra de que el PSPV ha abandonado toda responsabilidad y que esto supone una gran falta de "sensibilidad hacia la memoria del artista, hacia su familia y hacia el conjunto de los alcoyanos, que entienden el cementerio como un espacio de recogimiento, respeto y dignidad, no como un escenario de este tipo de actividades". Todo ello, pidiendo más explicaciones al ayuntamiento, que lo niega. "En ningún momento se solicitó, autorizó ni registró" ninguna escena de "carácter sexual o pornográfico" y que "de haberse producido, la habrían denegado". La polémica está servida.