Japón ha puesto en marcha una campaña insólita llamada "Sake Viva". Se trata de un empuje que ha querido dar la Agencia Tributaria nipona a la industria de las bebidas alcohólicas. La población japonesa envejece y las generaciones jóvenes consumen menos alcohol que las anteriores; y eso tiene consecuencias en la recaudación de impuestos. Lo que se pide es que los jóvenes de entre 20 y 40 años aporten ideas para dar nuevos servicios y métodos de promoción para estimular la demanda de productos como el sake, el shochu, el awamori, la cerveza, el whisky, el vino o el licor, entre otros. Esta es la página web que explica, con todo tipo de detalle, en qué consiste la campaña y a quién va dirigida.