En Dinamarca, el zoo de Aalborg ha abierto una vía poco habitual de colaboración con la ciudadanía. Pide a los propietarios de mascotas que cedan animales sanos como conejos, cerdos o caballos que tengan que ser sacrificados, para que puedan ser utilizados como alimento para sus depredadores. El centro asegura que "serán eutanasiados suavemente" de manera controlada y profesional, y defiende que así nada se malbarata.
"Si tenéis un animal sano que hay que sacrificar por varios motivos, podéis dárnoslo. Personal cualificado sacrificará los animales con cuidado y después los utilizará como alimento. De esta manera, no se malgasta nada y garantizamos el comportamiento natural, la nutrición y el bienestar de nuestros depredadores," instó el zoológico a sus visitantes.
El objetivo es ofrecer a los animales carnívoros una dieta que se parezca tanto como sea posible a la que tendrían en su hábitat natural, ya que lo que quieren, según ellos, es "imitar la cadena alimenticia de los animales". El zoo sostiene que es una medida pensada para garantizar el bienestar y el comportamiento instintivo. En el caso de los caballos, que tienen que ser entregados con pasaporte, incluso se ofrece la posibilidad de aplicar deducciones fiscales, siempre que se cumplan las condiciones legales y sanitarias.
La iniciativa ha generado opiniones divididas. Hay quien valora la eficiencia y la coherencia biológica, y también quien la percibe como una práctica difícil de aceptar, especialmente cuando se habla de animales de compañía. Pero la reacción más habitual ha sido la de calificar esto de "invento enfermizo".