El Parque Natural del Montseny se encuentra en la Cordillera Prelitoral Catalana, ocupando una extensión de 31.063,90 ha distribuido entre dieciocho municipios que pertenecen a tres comarcas: Osona, la Selva y el Vallès Oriental. Los límites naturales del Parque son la riera de Arbúcies, los cursos altos de la riera Major y del río Gurri, el Congost y la plana del Vallès.

Tres grandes conjuntos montañosos configuran el macizo: la carena del Turó de l'Home y las Agudes, el Matagalls y el plano de la Calma

Lluis Martinez, director del Parque Natural del Montseny, explica que el rasgo diferencial del parque es "la altitud destacable en relación en las planas y cordilleras que lo rodean y la situación próxima al mar". Este hecho le proporciona "unas características climáticas, que explican la diversidad de paisajes que se pueden encontrar en el macizo del Montseny."

Iñaki Relanzón / Diputación de Barcelona

Iñaki Relanzón / Diputación de Barcelona

Con respecto a la geología del macizo del Montseny, se estructura en dos partes bien diferenciadas:

- El zócalo, compuesto por los materiales más antiguos, entre 550 y 300 millones de años, formado por rocas ígneas y metamórficas.

- La cobertura, constituida por rocas sedimentarias depositadas durante las eras geológicas mesozoica y cenozoica, desde hace unos 300 millones de años hasta la actualidad.

La flora

La vegetación que se desarrolla en el Montseny viene determinada por las diferencias de humedad y temperatura. Al ganar en altura, se reproducen las formaciones vegetales características de la mediterránea:

- En las partes bajas: encinares, alcornocales y pinares.

- De la montaña media lluviosa arriba: encinar montañés y robledales.

- Por encima de los 1.000 m: hayedos y abetares

- En las cimas: matorrales y prados culminals.

Iñaki Relanzón / Diputación de Barcelona

Iñaki Relanzón / Diputación de Barcelona

La confluencia de estos factores con un relevo abrupto y la presencia de torrentes y riscales, da como resultado una gran variedad de hábitats. Por eso, en este lugar se puede encontrar especies relictuales y ejemplares aislados, que encuentran en la zona el último rincón donde establecerse. Son ejemplos la drosera, la hierba de Sant Segimon o la genciana amarilla, entre otros.

La variedad paisajística explica que la flora del Montseny conste de 2.800 especies diferentes

Así pues, la vegetación del Montseny está formada por paisajes propios de la Europa Occidental. Los encinares y los pinares típicos de la región mediterránea llegan a los 900 metros de altitud. Los hayedos, los robledales y algunos bosques de abetos son representantes de la región eurosiberiana, hasta los 1600 metros y en los prados y matorrales culminals se encuentran elementos de vegetación boreoalpina.

Iñaki Relanzón / Diputación de Barcelona

Iñaki Relanzón / Diputación de Barcelona

La fauna

La fauna del Montseny se caracteriza por la existencia de especies típicas de tierras centroeuropeas en las zonas altas del macizo y para la fauna propia de ambientes mediterráneos más meridionales en las partes más bajas. Un gran número de especies encuentran las condiciones adecuadas para desarrollarse, hecho que hace evidente la existencia de estos dos grandes grupos en un espacio relativamente reducido.

Se tiene constancia de la existencia de 270 especies de vertebrados

Manel Cuesta / Diputación de Barcelona

Manel Cuesta / Diputación de Barcelona

El carácter boscoso del Montseny determina la fauna que lo habita. Por eso, en el encinar es habitual la presencia del jabalí, el zorro, el jineta o la rata cellarda, entre los mamíferos más conocidos. Con respecto a las aves más comunes: el azor, el arrendajo o el petirrojo. También son habituales varios tipos de anfibios, reptiles y peces.

Restan aisladas las especies de influencia centroeuropea, como el caso de la rana encarnada, el tritón del Montseny, única especie de vertebrado endémica de Catalunya, o la musaraña de agua. Otras especies de distribución centroeuropeas son: la liebre, el lirón, el grasset de montaña, el pinzón borroner, el lagarto verde y la víbora pirenaica.

Iñaki Relanzón / Diputación de Barcelona

Iñaki Relanzón / Diputación de Barcelona

La diversidad faunística del macizo es la más importante de la región

Así pues, en el Montseny son representadas tres grandes regiones biogeográficas: la mediterránea, la eurosiberiana y la boreoalpina.

El patrimonio edificado

Las construcciones megalíticas de la sierra del Arca son las más antiguas. La muralla del castillo de la colina de Montgrós, el Brull, constituye uno de los elementos más impresionantes de la época Ibérica que se puede encontrar en Catalunya. De la Edad Media se pueden ver muestras románicas de la arquitectura religiosa, con más de una docena de pequeños templos de montaña. Se destacan las iglesias parroquiales del Montseny y del Brull.

Román Hereter / Diputación de Barcelona

Román Hereter / Diputación de Barcelona

Son relevantes también, los restos de edificaciones de canto militar como los castillos de Montsoriu, de Montclús, de Fluvià, del Brull, de Cruïlles, y las masías fortificadas del Bellver o la Sala. Construcciones de los periodos románico y gótico también están presentes, como el conjunto de Tagamanent o el de Sant Segimon. El elemento arquitectónico más habitual del Montseny es la masía.

Itinerarios y actividades para hacer

Dentro del área del Montseny, existen muchos itinerarios y recorridos para hacer. Según del tiempo que se disponga y las ganas de caminar y hacer una buena excursión, la diversidad de lugares por donde pasar y la gran oferta de rutas para hacer, permite al usuario escoger cuál es la más adecuada en cada caso.

Joan Mercader / Diputación de Barcelona

Joan Mercader / Diputación de Barcelona

El director del Parque Natural del Montseny, Lluis Martinez, recomienda algunas excursiones por hacer:

- Entre los itinerarios de baja dificultad: el del Sot de l'Infern, próximo a la Costa de Montseny, el de la riera de Vallforners, en Cànoves, o el Castaño de las nueve ramas, también apto para hacer con familia, con inicio en el pueblo de Viladrau. Este, es un sendero que permite conocer un árbol monumental a través de un recorrido que transcurrir por las fuentes de Viladrau.

- Entre los itinerarios de dificultad media: el forestal de Fontmartina, ideal para conocer las especies forestales más características del parque.

- Entre los itinerarios de dificultad alta: el PR-C 211 Riera de Gualba, un recorrido que permite acceder al Valle de santa Fe desde la estación de RENFE de Gualba. De hecho, Martinez detalla que "el valle de Santa Fe es una de las zonas más visitadas, por la frondosidad del hayedo y la presencia del pantano."

Iñaki Relanzón / Diputación de Barcelona

Iñaki Relanzón / Diputación de Barcelona

¿Cuándo visitar el parque?

Según datos del máximo responsable del Parque Natural, anualmente se estima que el número de visitantes del parque gira al millón de usuarios, sobre todo durante los fines de semana de otoño. La gran parte de los visitantes vienen de Barcelona y alrededores, a pesar del incremento del número de visitantes extranjeros.

Martinez destaca que "el parque se puede visitar durante todo el año". Apunta que "el estallido de la primavera permite descubrir la abundancia y esplendor de la vegetación, en verano es fácil encontrar algún rincón sombrío bajo la mirada del hayedo o gracias a la frescura de una riera, el otoño despunta en el Montseny con su variabilidad cromática y la eclosión de los frutos que resultan y en el invierno, la frialdad, la niebla de las cimas y las bolas de nieve que, año tras año, aparecen, en algún momento al Turó de l'Home, hacen de esta estación otro rasgo singular con el fin de poder visitar el Montseny".

Joan Mercader / Diputación de Barcelona

Joan Mercader / Diputación de Barcelona

Con la colaboración de la Generalitat de Catalunya

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