"Tener un mensaje, saber comunicarlo y ser optimista al respecto". Esta frase es de Marian Rojas Estapé, psiquiatra y experta en liderazgo, pero es una definición que inspira a todos aquellos que se interesan por esta tema. Es el caso de Miriam Ballesteros, que dedica parte su tiempo a escribir artículos y participar en conferencias por Europa y los Estados Unidos sobre los tres grandes ejes que lo ocupan actualmente: el liderazgo femenino, el FinTech y el marketing.

El primero de ellos tiene una especial relación con la actualidad. En el pasado mes de abril, la revista Forbes publicaba un artículo que señalaba que la mejor respuesta al coronavirus había tenido lugar en siete países liderados por mujeres (Alemania, Nueva Zelanda, Taiwán, Noruega, Dinamarca, Islandia y Finlandia). "El liderazgo femenino potencia la empatía, un atributo fundamental en tiempo de crisis," apunta Ballesteros, que al mismo tiempo admite que también pueden haber influido otras variables. No obstante, considera que lo ideal es reunir una diversidad de atributos catalogados como masculinos - "capacidad analítica, eficacia económica y toma rápida de decisiones" - y como femeninos -"comunicación empática, pensar a largo plazo, prácticas de cooperación con el equipo"-.

Además, Ballesteros añade dos elementos a la definición inicial de Rojas para explicar su concepción de liderazgo: coherencia y saber comunicar en tiempo de crisis. "No hay nada que cree más desconexión que tener un jefe que predique unas cosas y que en la práctica diga otras. Si como empleado ves que no hay coherencia, te desanimas", explica en relación con el primer elemento. Sobre el segundo, estrechamente vinculado a la actualidad, recomienda "intentar comunicar de forma frecuente la información que sabemos y hacerlo con un mensaje positivo, pero muy realista". El factor del liderazgo, de hecho, ha tenido una gran incidencia en la respuesta de las empresas a la crisis. "Es lo que ha marcado la diferencia entre compañías donde te gustaría trabajar y de otros que tienen una gran parte por mejorar", sostiene Ballesteros, que señala que las que salen adelante mejor son aquellas que "han puesto al empleado a punto de mira de la crisis" y las que han favorecido "la capacidad de adaptación a un nuevo escenario" para verlo como una oportunidad.

"Es lo que ha pasado en el sector delatecnologia financiera (FinTech)", reivindica Ballesteros. Un sector en el que está especializada y a lo que se dedica desd'Strands, la empresa donde ejerce como Directora de Màrqueting. "La esencia del FinTech es facilitar la transformación digital de los bancos a través de la innovación tecnológica", define. Una transformación que es más oportuna que nunca en un contexto marcado por el confinamiento: "Las industrias que no tenían la digitalización en el ADN han visto que tenían esta necesidad de ofrecer mejores servicios y de aportar valor al usuario".

Otra de las claves para aportar valor al usuario es el marketing. Como buena amante de las frases célebres, para Ballesteros es fundamental partir de la cita del empresario norteamericano Seth Godin: "No utilices el marketing para solucionar problemas de tu empresa: utilízalo para solucionar los problemas de tus clientes". Desde esta base, considera que el principal riesgo de una empresa es desvincular el marketing de la calidad del producto: "Si tú quieres hacer marketing pero tu producto no es bueno, primero encárgate de ofrecer alguna cosa que aporte valor".