Controlar los niveles de azúcar en la sangre requiere atención las 24 horas del día para las personas diagnosticadas con diabetes. Una dieta más saludable y una mayor actividad física pueden ayudar, pero muchas personas con la afección también necesitan inyecciones regulares de insulina, la principal hormona que regula el azúcar.

Para administrar este medicamento de una manera menos invasiva, los investigadores de ACS Applied Bio Materials han informado sobre un prototipo de parche cargado de insulina que se adhiere cómodamente al interior de la mejilla de una persona.

España es el segundo país de Europa con mayor prevalencia de la diabetes, con algo más de 5 millones de personas sufriéndola, ya sea porque sus cuerpos no producen la hormona (tipo 1) o no responden bien a lo que producen (tipo 2). Las personas toman insulina principalmente inyectándose o tienen bombas semipermanentes implantadas. Estos métodos son invasivos e incómodos, y requieren una eliminación segura de agujas o de riesgo biológico y condiciones estériles.

Los investigadores han explorado otras formas de administrar insulina a través de la piel, como lociones tipo gel. Pero la piel es una barrera demasiado buena y la medicación se mueve lentamente en el cuerpo. Por el contrario, la membrana que recubre el interior de la boca es muy delgada, aproximadamente una cuarta parte del grosor de la piel, lo que la convierte en un lugar potencial para que las medicinas ingresen fácilmente al torrente sanguíneo.

Prueba de azúcar : Pixabay
Prueba de azúcar / Pixabay

La investigación

Es por ello que un grupo de investigadores quisieron ver si un material que habían desarrollado previamente, una estera de fibra de polímero que se activa con el calor para liberar medicamentos, podría adherirse al revestimiento de la mejilla y administrar insulina. Los expertos empaparon primero pequeños cuadrados de una estera de nanofibras, hechas de fibras electrohiladas de ácido poliacrílico, Beta-ciclodextrina y óxido de grafeno reducido, en una solución con insulina durante tres horas.

Además, el equipo aplicó los parches cargados de insulina en el revestimiento de las mejillas y las córneas de unos cerdos. Calentar el material con un láser de infrarrojo cercano durante 10 minutos a 50º C activó el material y liberó insulina en los dos tipos de membranas varias veces más rápido que a través de la piel. Además, los investigadores colocaron los parches in vivo dentro de las mejillas de tres cerdos insulinodependientes.

El revestimiento de las mejillas no mostró irritación ni cambios visuales debido al calor del láser. Tan pronto como se activó el material, los niveles de azúcar en la sangre de los cerdos disminuyeron. Simultáneamente, los niveles de insulina en plasma de los animales aumentaron, lo que, según los investigadores, es una prueba de concepto de que esta plataforma preliminar es eficiente para llevar la insulina al torrente sanguíneo.

Finalmente, seis voluntarios humanos colocaron una versión placebo del parche dentro de sus mejillas y dijeron que se sentían cómodos en un período de prueba de dos horas. Los investigadores afirman que su próximo paso es realizar más estudios preclínicos del prototipo en modelos animales.