En los últimos años el entrenamiento ha evolucionado de manera significativa. De hecho, se han implementado nuevos sistemas de entrenamiento que incluyen tanto ejercicios tradicionales modernizados como ejercicios funcionales.
Muchas han sido las investigaciones que demuestran los beneficios de estos sistemas de entrenamiento. Pero cada uno te brinda una serie de elementos positivos a la hora de cambiar tu estilo de vida a uno más activo. En pro de mejorar tu salud, rendimiento o apariencia física.
Salud mental y rendimiento van de la mano
Evolución: preparación física y psicológica
El entrenamiento y su evolución, ha llevado al ser humano a conquistar podios, romper marcas, cambiar físicos, mejorar la movilidad… Incluso a corregir patrones en situaciones adversas.
Es más, también se ha dado paso al entrenamiento mental, considerado como un sistema de entrenamiento que busca como objetivo principal desarrollar la concentración en situaciones de estrés en el deporte. Nuestros pensamientos juegan un papel muy importante a la hora de establecer metas en la planificación de objetivos sea cual sea nuestro nivel.
La preparación psicológica también es necesaria para asegurar un incremento del rendimiento físico. En este sentido, el entrenamiento psicológico mejora la disciplina, la perseverancia, la fuerza de voluntad, la seguridad y la valentía.
¿Qué sistema de entrenamiento elijo?
Pensar el mejor sistema de entrenamiento no es lo más conveniente. Cada uno ofrece unos beneficios distintos y ayuda a conseguir diferentes objetivos. Lo que si podemos decir es que cada uno busca la movilidad y acondicionamiento como factor clave.
Atrás quedo el ejercicio empírico. En la nueva era es casi imposible aburrirse con el entrenamiento. Estos sistemas te invitan a hacer del ejercicio parte de tu vida, con novedosos métodos y modernos maquinarias creadas desde la base científica.
Existen en la actualidad sistemas como entrenar en suspensión, entrenar con pesas rusas, entrenamiento con material funcional, ciclo indoor en bicicletas con movilidad, maquinarias unilaterales y mucho más.
Los deportistas de élite entrenan con estos sistemas de la nueva era, sin dejar atrás el entrenamiento empírico, se suele utilizar una combinación de ambos. Así se consigue mejorar la técnica, incrementar la fuerza, aumentar la masa muscular… O cualquier objetivo que se proponga. Lo que está claro es que se busca conseguir resultados extraordinarios, rápidos y duraderos en el tiempo.
Sea cual sea el objetivo es importante que evalúes tu condición física de la mano de expertos y en base a los resultados optes por el sistema que más te guste y sea apto para tus capacidades físicas. Lo importante es que te ejercites y vivas a plenitud. Invertir en deporte es invertir en salud. Atrévete y sal de tu zona de confort.